La irrupción de Oscar ralentiza el fichaje de un central más

Blindar a Oscar Naasei ampliándole el contrato era una de las misiones de la comisión deportiva del Granada antes de que arrancase la pretemporada, y el club lo hizo oficial al cuarto día de la misma. Con contrato hasta 2028, su cláusula ronda los 10 millones de euros según pudo saber IDEAL. Con esa tranquilidad, Guille Abascal está dándole al central muchos minutos en los amistosos de verano, y la satisfacción entre la dirección del club emplaza incluso a apurar el mercado por una oportunidad que verdaderamente merezca la pena aun sin dejar de evaluar a otros zagueros ya que el paso de las semanas hasta el cierre podría dejar al alcance opciones ahora mismo inviables.

Titular en el primer partido del verano, contra el Orlando Pirates y con Ignasi Miquel como capitán a modo de tutor a su lado, Oscar ya demostró sus virtudes y los riesgos que las mismas acarrean con varias conducciones no siempre exitosas, ya que una pérdida suya terminó con el gol de los sudafricanos. El ghanés ejerció de lateral derecho frente al Almería por las molestias musculares de Ricard Sánchez y también ahí se desempeñó con soltura, luciendo su zancada y atreviéndose con algún golpeo a puerta o para centrar incluso con el exterior. La incorporación de Rubén Sánchez, no obstante, le devolvió a la zaga ante Las Palmas con Miguel Rubio como compañero en esa ocasión; y también ese día, pese a empezar en el lado zurdo y acabar en el diestro, se atrevió con una cabalgada entre cinco rivales tras rotar sobre sí mismo ante el punta que sorprendió a todos, atrevido también para buscar paredes con los mediocentros.

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Captado por la estructura de cantera que ahora lidera José Fernández procedente de la Emmanuel City Football Academy de su país, Oscar Naasei llegó a Granada para militar en el novedoso equipo 'C' que la temporada pasada se paseó por la Tercera Andaluza. Los responsables de las categorías inferiores no tardaron en querer probarle bajo una mayor exigencia, pero su debut con el Recreativo en Primera RFEF no se produjo hasta marzo y ya con Germán Crespo como entrenador del filial pese a que Juan Antonio Milla le convocara para dos partidos en septiembre incluso.

Aunque los problemas del Recreativo en la categoría no incitaban precisamente a darle una oportunidad a Oscar, los jefes de Crespo apremiaron al técnico a que confiara y así lo hizo por primera vez en una visita al Melilla. La irrupción del central en aquel debut fue idéntica a la que ahora protagoniza en la pretemporada del primer equipo, con descaro para arriesgar con la pelota tanto en pases verticales y cambios de orientación como en conducciones que ya llevan su sello.

El filial perdió aquel encuentro que ganaba por 0-3 a falta de media hora, pero nadie sentaría ya a Oscar. Siete días después, una de sus salidas desde atrás con desplazamiento posterior a Sergio Rodelas acabó con el zurdazo del extremo que tumbó al Atlético de Madrid B en la Ciudad Deportiva para que el filial volviera después de 18 jornadas sin hacerlo. Solo faltó ya para última jornada, y porque fue a Girona citado por José Ramón Sandoval para el primer equipo sin vestirse luego no obstante.

Ocurre algo similar a lo de Oscar con Miguel Ángel Brau y Pablo Sáenz, aunque con una mayúscula diferencia: ellos dos no son ya sub-23 y no podrían alternar el primer equipo con el filial. El buen desempeño de Brau ha logrado que la comisión deportiva no considere que urja reforzar el lateral izquierdo, mientras que Sáenz se está ganando ingresar entre los cinco extremos que Matteo Tognozzi contempla junto al recién incorporado Giorgi Tsitaishvili, Kamil Józwiak, Theo Corbeanu y el también recreativista Sergio Rodelas. Sin embargo, una oportunidad de mercado de aquí a que cierre obligaría a estudiar sus cesiones. Con Oscar, como ocurre con Rodelas, siempre existe la opción de tenerles en el Recreativo y contar con ellos cuando se estime sin que vaya en perjuicio del filial.