Los jugadores en la rampa de salida siguen con el grupo

Otro jugador en el escaparate es Alberto Perea, quien mantuvo una larga conversación con Paco López al final del entrenamiento de este jueves. Perea ha sonado para algunos proyectos de Segunda división, pero de momento no ha dado el paso definitivo para desvincularse. Renovó por un curso más tras el ascenso por una cláusula contractual y no parece sencillo un traspaso ni una rescisión a coste cero.

También están pendientes de su futuro Bodiger y Soro, con muchas alternativas sobre todo para el primero, al que desea con insistencia el Tenerife. En otro nivel, estaría por resolver las situaciones de Antoñín y Dionkou, los otros dos cedidos que retornaron.

Con respecto al día a día, Miguel Rubio sigue trabajando con el readaptador por unas molestias con las que regresó de las vacaciones. En principio, su integración llegaría pronto. La anécdota de la sesión abierta a la prensa es que Antonio Puertas llegó más tarde que el resto. El equipo tenía previsto arrancar a las 9 horas, ya todos vestidos, y él llegó unos minutos más tarde, llevándose la 'ovación' de sus compañeros y el pasillo de collejas. Le tocará pagar una multa al almeriense. Luego se integró con normalidad.

La sesión, con varias situaciones con balón, primero en disputas de tres equipos mezclados y luego en duelos uno contra uno y dos contra dos, tuvo un momento de reprimenda de Paco López en los compases iniciales, quizás por un lapso de peor intensidad. Luego todo discurrió sin alteraciones, con buena disposición de todos. El entrenamiento concluyó con nuevas series de carreras para ir optimizando la puesta a punto física.