Lauri desatasca al Granada

El Granada volvió a la senda de la victoria en Liga con un triunfo mucho más disputado de lo que debía ser. Y es que las rojiblancas, que sabían que el partido ante el Oviedo era una trampa, fueron superiores con una diferencia abismal. Sin embargo, no tuvieron su día en los últimos metros y desaprovecharon una infinidad de ocasiones ante una Canales muy segura sobre todo en los balones por alto. En el ecuador del segundo tiempo, un gol de Lauri evitó una mayor frustración y dejó los tres puntos en casa.

Más allá de la vuelta de Sandra bajo palos, no hubo rotaciones. Ángeles entró como delantera titular en lugar de Noe, que actuó de falsa referencia ante el Atlético en Copa. El Granada salió con una consigna muy clara y trató de buscar el 1-0 desde el primer minuto. Fue una salida descarada y que bien mereció el premio del gol. Con Laura Pérez percutiendo muy bien por la diestra, las jugadas empezaron a sucederse.

La falta de presión ovetense posibilitó a las rojiblancas buscar la sorpresa con disparos muy lejanos de Lauri y Laura Pérez. El de la primera se marchó alto y el de la segunda al lateral de la red. También buscó el tanto Alicia, que aprovechó una jugada maradoniana de Laura Pérez para disparar desde la frontal. Canales, la portera visitante, empezó a emerger como figura del choque al sacar el disparo con la yema de los dedos.

La portera se convirtió en la pesadilla de un Granada que perdió ese vigor inicial, sin sufrir por ello en el área propia. La buena circulación de balón se mantuvo, pero se empezó a evidenciar el único mal achacable a las nazaríes ante el Oviedo, la falta de contundencia. Ángeles, Naima y Lauri pisaron mucho pero sin éxito el área en el primer tiempo. Una buena jugada de nuevo de Laura Pérez acabó en un centro al segundo palo, donde Lauri, tras un esfuerzo, controló y la devolvió al corazón del área, rasa y tensa para empujarla. No se puede saber bien cómo, ni Ángeles ni Naima completaron la tarea.

El segundo tiempo trajo más de lo mismo durante el primer arco argumental, en el que Canales descolgó cada uno de los balones aéreos con los que Alba y Gaste quisieron asistir a sus compañeras. Empezaba a vislumbrarse un poco de frustración y, sobre todo, de cansancio en algunas jugadoras. Solo Lauri y Pamela lograron girar al Granada y encontrar campo abierto. La capitana pudo hacer el primero en un disparo hacia la escuadra que se topó con el vuelo de Canales. El Oviedo en ningún momento asustó a Sandra y, aunque pretendía jugar con el crono, llegó a partirse para desesperación de las azules, que empezaron a reprocharse el no estar más juntas.

Premonición, pues fue eso lo que les arrebató el punto. Pamela, que ya había lanzado varios contragolpes prometedores, volvió a robar y a encontrar por dentro a Lauri. La capitana cambió todo el juego con un pase demasiado fuerte hacia Naima. Parecía una mala ejecución del a '10', pero Naima la hizo buena salvando el balón sobre la línea. Su defensora, sorprendida por el esfuerzo, acudió tarde y se llevó una sotana de la extremo granadinista, que se metió hacia el área y asistió de nuevo a Lauri, que esta vez sí ajustó más su chut, pegado al palo largo y por bajo en lugar de buscar la altura. Golazo y un peso de encima que se quitaron las de Lamesa.

No obstante, y aunque quedaba mucho partido, al 1-0 no le siguió una catarata de fútbol nazarí. El Oviedo siguió roto, dejando mucho espacio en el medio, pero el peor enemigo de las locales fue el cansancio acumulado en esta semana de tres partidos. Incluso hubo un par de imprecisiones en defensa que permitieron al Oviedo buscar el empate. Por suerte, Marta Carrasco y Postigo fueron una línea inexpugnable, muy ayudadas por la uruguaya Pamela. La charrúa tuvo el 2-0 ya en el descuento, con un frentazo en el área chica que se marchó alto por poco.

El triunfo permite respirar al Granada, que debía vencer en casa a las ovetenses para hacer positivo el punto sumado en Vallecas. Las horizontales deben encontrar esa inercia ganadora tan difícil de agarrar en una categoría extremadamente igualada como la 1ª RFEF Femenina. Lo ha demostrado el choque ante un Oviedo que sufrirá por salvar la categoría, pero que también hará sufrir a cualquier equipo de la parte alta en 90 minutos.

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