Abram regresa tras el parón aunque despierta interés en Latinoamérica

Tanto el uruguayo como el peruano poseen cartel en sus respectivos países y en otros vecinos y el Granada está dispuesto a escuchar ofertas por ellos aunque de momento no se han decantado por las propuestas sobre la mesa; en el caso del delantero se trataría de una cesión por la importante inversión de más de cinco millones por el 50% de sus derechos hace solo un año, mientras que por el central sí busca un traspaso tras firmarle libre en el verano de 2021.

Ambos ocupan además plazas de extracomunitarios, sin más casos que los suyos en la plantilla al poseer tanto el uruguayo Erick Cabaco como el argentino Jonathan Silva pasaporte italiano. La entidad desea reforzar su ataque para el objetivo del ascenso esta misma temporada y pretende que Matías Arezo tenga allí donde vaya la continuidad de la que nunca ha llegado a gozar en Granada, que es lo que entiende que necesita a sus 20 años. Ya sonó con fuerza para regalar en el fútbol argentino el pasado verano. Luis Abram, por su parte, no tiene cabida en los planes de Paco López, que ya cuenta como centrales zurdos con Ignasi Miquel y con Raúl Torrente, al que espera sumar próximamente a la competición y que ya cerró la puerta al peruano con su irrupción el pasado ejercicio.

Luis Abram fue protagonista en el Cruz Azul hasta la llegada del entrenador mexicano Raúl Gutiérrez, que dejó de contar con él en muchos partidos tras sufrir una escándalosa goleada del América por 7-0. Lo había jugado casi todo hasta entonces con el peruano Juan Reynoso y con el uruguayo Diego Aguirre. Pese a estar satisfecha con su rendimiento, la directiva de Cruz Azul decidió no comprarle.