Morilla se la jugó en su debut con defenestrados

El debut de Pedro Morilla al frente del Granada CF comenzó a deparar noticias mucho antes de que comenzara a materializarse. Y todo, porque confeccionó una alineación con respecto a la última dispuesta por su predecesor José Luis Oltra en la que hubo cuatro cambios, de los que tres fueron obligados y uno incluso por su propia decisión.

Así, las sanciones de Víctor Díaz y Darwin Machís le obligó a recurrir a Quini y Hjulsager, mientras que la ausencia del internacional Sergio Peña le llevó a emplear a Antonio Puertas, que como el primero parecía defenestrado. Pero es que aparte, Morilla optó por dar descanso a Saunier, de modo que rescató de la grada a Germán.

Sin lugar a dudas, esta decisión no forzada fue una clara declaración de intenciones para poner en evidencia que nadie es intocable.

El tema está en que al final acabó marcando el gol de la victoria Espinosa, que es otro jugador que fue perdiendo protagonismo de manera paulatina con José Luis Oltra.