Promesas e inquietudes

Cuando las preocupaciones del campeonato liguero son prioridad, a algunos conjuntos de Primera las visitas a rivales menores se convierten en incómodos trámites. Campos pequeños, estados irregulares del césped, fogosidad de los contrincantes ante la oportunidad de confrontar a jugadores consagrados, acumulación de partidos a mitad de semana, suman para hacer amargas algunos de dichos desplazamientos, cuando no malos recuerdos que recrudecen las cuitas en Liga.

La disputa en un campo amplio como el Heliodoro Rodríguez de Tenerife jugó a favor del Granada en su duelo ante el CD Laguna. La diferencia abismal de calidad entre los planteles de ambos clubes hizo el resto. Si, además, la inocencia defensiva del equipo canario contribuye a romper las tablas concediendo un penalti innecesario para el primer gol, la visita se convierte en placentera, en un entrenamiento ante un esparrin muy asequible tras un largo viaje, único inconveniente.

Lo mejor fue contemplar los primeros frutos del trabajo de cantera, con la subida de promesas con ganas de demostrar su preparación. Tres goles del debutante Butzke son una magnífica tarjeta de presentación de un jugador de la provincia que ha pasado por todos los niveles inferiores rojiblancos. Junto a la confirmación de la sobriedad y diligencia defensiva de Pepe y Torrente, aptos para las demandas del primer equipo, otro joven, de origen malagueño, Bryan Zaragoza, demostró también su desparpajo y verticalidad para el desborde por banda, de los que hace gala jornada tras jornada con el Recreativo de Granada. Al lado de ellos, jugadores consagrados, como Milla, felizmente recuperado, fue el más clarividente en el centro del campo, o un veterano al que se le siguen cayendo los goles del bolsillo, don Jorge Molina.

Por contra, las inquietudes de que Bacca sigue muy alejado de una forma física que permita atisbar una mayor utilidad del colombiano, estando hoy muy lejos de lo esperable por su trayectoria. Y que las limitaciones de Arias en sus prestaciones defensivas, las carencias asociativas de Monchu y Eteki, y la escasa profundidad de Soro y Puertas en este curso, también son apreciables ante un rival que ofreció muchas facilidades.

Ante el Alavés el viernes habrá que exigir un esfuerzo máximo a todos los que salten para alcanzar una tercera victoria que permita otear el futuro en el campeonato con más tranquilidad.