La venta del Granada, en horas frenéticas

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José Ignacio Cejudo

Empieza a notar la presión no solo social sino la del posible embargo de las acciones de esta sociedad por parte de Gino Pozzo, el anterior propietario. Desde el entorno del italiano, se habla de medidas cautelares inminentes. Li necesitaría no menos de seis meses, en el mejor de los escenarios a su favor, para recuperar el Granada, por lo que lo probable es que la intervención judicial por lo de Pozzo se haya ejecutado y no tenga margen de maniobra posterior al de ahora con los granadinos.

La sociedad que administra Li es la dueña de Daxian, en la que aparece Sophia Yang, presidenta del Granada. Ella sí es favorable a lo preacordado y así lo ha trasladado a su superior en China, el presidente del grupo Dangdai, Luming Ai. Salcedo y su gente también hablan con Lili Wang, miembro vigente del consejo del Granada, que se está mostrando algo más flexible.

Los granadinos que quieren comprar el club esperan a nuevos contactos con China en los que se pongan las cartas sobre la mesa, incluidos los riesgos en los que incurren los propietarios si no aprueban el preacuerdo, por lo de Pozzo y con LaLiga. La cuestión es si se hará este viernes, fecha máxima que se autoimpuso Salcedo, o habrá cierto margen.