Los alumnos expulsados por indisciplina deberán hacer cursos reeducativos. Adobe Stock

Meloni pone firme a la escuela

'Decreto Valditara' ·

El Gobierno conservador de Italia aprueba una controvertida ley educativa que refuerza el peso de la nota de conducta

Sábado, 12 de octubre 2024, 18:05

s un paso muy importante que pone en valor los principios de responsabilidad individual y de respeto hacia las personas y los bienes públicos y que pretende dar cada vez más autoridad al papel de los docentes». Con estas palabras celebró la aprobación en Italia ... de la nueva ley sobre educación Giuseppe Valditara, ministro del ramo en el Gobierno conservador de Roma liderado por Giorgia Meloni. Miembro de la Liga, el partido ultraderechista encabezado por Matteo Salvini, Valditara ha hecho del retorno del principio de autoridad a las aulas el faro de su acción política al frente del Ministerio, al que incluso ha cambiado el nombre y que ahora se llama 'de Educación y del Mérito'. La medida estrella del conocido como 'decreto Valditara', que entra en vigor ya en este curso, es la recuperación de la nota de conducta en las escuelas medias -equivalente en España a los cursos de sexto dePrimaria y primero y segundo de ESO- y el mayor peso de dicha calificación en la educación superior, hasta el punto que impedirá pasar de curso en caso de ser inferior a 6 (sobre 10).

Publicidad

La nueva normativa establece además multas de hasta 10.000 euros para los alumnos que agredan a los docentes o a los otros miembros del personal de los centros y cambia el tratamiento de los estudiantes que hayan sido expulsados por motivos disciplinarios. Ya no se quedarán en casa, sino que tendrán que realizar actividades escolares o extraescolares de carácter reeducativo en el propio instituto o en instituciones externas de carácter social.

La educación Primaria tampoco se libra de la reforma al recuperarse el viejo sistema de evaluación, de manera que las notas de los niños de hasta 10 años de edad serán a partir de ahora 'suficiente', 'discreto', 'bueno', 'excelente', 'insuficiente' y 'gravemente insuficiente', abandonando así las definiciones «incomprensibles», según Valditara, que se han venido utilizando estos últimos años, como 'avanzado', 'intermedio o 'base'.

Una medida polémica

Se recupera la nota de conducta en la educación media y se refuerza su peso en la superior

Aunque el ministro asegura que un 80% de los italianos apoya estas medidas, que «defienden a las personas de las agresiones, educan y cultivan en el respeto hacia el prójimo», lo cierto es que el decreto ha generado una gran controversia en el ámbito educativo. Más allá de algunos planteamientos exagerados, como el del diario alemán 'Bild', que comparó la reforma con un retorno a los tiempos del fascismo, pueden encontrarse opiniones para todos los gustos. Los estudiantes, los primeros afectados, ya han mostrado su oposición con una manifestación en Turín, la ciudad donde se encontraba el ministro el día en que la ley fue aprobada en el Parlamento. «Cuidado Valditara, que los estudiantes piden venganza», le gritaban. Se teme que el rechazo al polémico decreto sea uno de los motivos que se esconde detrás de las ocupaciones de institutos por parte de los alumnos que tienen lugar en muchos centros durante el otoño.

Publicidad

10.000 euros

de multa tendrán que abonar para los estudiantes que agredan a un profesor

«Un salto atrás en el tiempo»

«Se ha añadido otra tesela al proyecto represivo del Gobierno, que tiene en su base la criminalización de los estudiantes», asegura Paolo Notarnicola, coordinador nacional de la red de estudiantes de la escuela media, quien sostiene que la nota en conducta se convierte en ocasiones en «un instrumento para castigar la participación política» de los muchachos. La oposición ha criticado igualmente la reforma educativa. Mientras que Elly Schlein, líder del Partido Democrático, principal fuerza de la izquierda, la consideró «un salto atrás en el tiempo» que sólo pretende «clasificar y controlar», Nicola Fratoianni, de Alianza Verde e Izquierda, aseguró que se trata de la «confirmación de la idea represiva y retrógrada» que, a su juicio, mueve al Ejecutivo de Meloni.

La prumera ministra italiana vive envuelta en la polémica. Reuters

Entre los expertos y docentes también hay debate acerca de si la educación italiana necesitaba ese tipo de reforma y el impacto que pueda suponer ahora la aplicación de su aspecto más controvertido, el mayor peso de la nota de conducta. «Yo la valoro positivamente, porque debería ayudar a los chicos a que entiendan la importancia del comportamiento, al tiempo que comunica con claridad a las familias cómo la escuela ve a sus hijos», señala Antonello Gianelli, presidente de la Asociación Nacional de Directores de centros educativos de Italia. Este docente considera que dar mayor peso a la conducta en el boletín de evaluación ofrece «un instrumento más» a los profesores, sin tratarse en cualquier caso de un elemento que «pueda cambiar las cosas» por sí solo. «Nuestra tarea debe ser siempre educar y cuando hay dificultades tratamos de que intervenga el psicólogo, pero en algunas ocasiones puede ser útil tener algún tipo de castigo para tratar de frenar ciertos comportamientos», señala Gianelli. Entre ellos incluye el 'bullismo' y las agresiones a los profesores. Según un estudio realizado por Eurispes, un 16% de los docentes italianos ha sufrido amenazas en alguna ocasión.

Publicidad

Evaluación

Vuelven las notas claras en primaria: 'suficiente', 'bueno', 'excelente' e 'insuficiente'

Ve la situación desde otro punto de vista Cristiano Corsini, docente de pedagogía experimental en la Universidad Roma Tre. «La idea de fondo es que la educación es un proceso sencillo y que por tanto, un sistema de premios y de castigos resulta adecuado para gestionarlo. La realidad es que las cosas no son así», comentó en Rai Radio 1. A su juicio, apostar por la «represión» puede resultar «contraproducente», como tampoco resulta adecuado el propio concepto de «conducta», que proviene «del ambiente carcelario».

Una aguinaldo para las familias, pero sólo para las tradicionales

La nueva ley educativa no es la única fuente de polémica en la que se ha visto envuelto en las últimas semanas el Gobierno de Giorgia Meloni. De hecho, ha resultado igualmente controvertida la decisión de otorgar una suerte de aguinaldo de Navidad para las familias, aunque no todas podrán acceder a ellas. Para poder optar a esta ayuda de 100 euros los trabajadores deberán acreditar una renta que no supere los 28.000 euros anuales y tener al menos un hijo, pero quedan excluidas las parejas de hecho, los divorciados o quienes no tengan hijos. Una decisión que ha sido muy criticada por los grupos de la oposición y los sindicatos al considerar que se trata de un comportamiento discriminatorio. «Lo importante para este Gobierno es subrayar siempre que hay un único tipo de familia, la tradicional», señaló Daniela Barbaresi, secretaria confederal del sindicato más importante de Italia, la Cgil.

Uno de los aspectos más controvertidos de la nueva ley estriba, para Corsini, en el hecho de que los alumnos de instituto que tengan una nota de comportamiento inferior a 8 no podrán beneficiarse de los 'bonus' que conceden los profesores en las evaluaciones de final de curso. Es entonces cuando los docentes tienen la opción de premiar a los alumnos teniendo en cuenta no sólo su rendimiento académico, sino también su esfuerzo fuera de las aulas ya sea en actividades deportivas, musicales o de otra índole. El experto de la Universidad Roma Tre también advierte de las diferencias que surgirán a la hora de aplicar la nota en conducta debido al amplio margen de subjetividad con que cuentan los docentes: «Se deja al arbitrio de cada profesor», lamenta.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad