Andrea G. Parra
Jueves, 9 de noviembre 2023, 00:28
Polémica. Sucedió a primeros de septiembre. Ocurrió en la Universidad de La Laguna (ULL). El protagonista fue un trabajador de la Universidad de Granada (UGR). La Universidad de la Laguna hizo un comunicado, al día siguiente de los hechos, que publicó en su página web ... manifestando su rechazo a «todo tipo de comentarios y actitudes machistas en esta institución».
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El jueves día 7 de septiembre, en el marco de las Jornadas de Mecenazgo y Patrocinio organizadas por el Consejo Social del citado centro académico, fue donde se produjo un hecho que la Universidad de La Laguna expresó que «lamentamos profundamente». En el comunicado el centro más antiguo de Canarias explicaba que uno de los ponentes de dicha sesión –y aportaba su nombre y cargo: Antonio Marín, director de Proyección Social, Patrocinio y Mecenazgo de la Universidad granadina–, realizó en su intervención un comentario, «machista, soez y deleznable». Marín pertenece al personal de administración y servicios (PAS) de la UGR.
El mencionado comunicado de la Universidad de La Laguna especificaba que fue al hacer referencia a la ingente cantidad de trabajo que gestiona, momento en el que, para ilustrar esta situación, añadió literalmente: «Menos sangre menstrual de la rectora, me han pedido absolutamente de todo; se lo digo a la rectora a veces para que nos riamos, bueno… ya exrectora actualmente».
Tras lo relatado, tanto el rector de la institución académica de la Laguna, Francisco García, como la presidenta del Consejo Social, María Dolores Pelayo, así como la Unidad de Igualdad de Género y el Instituto Universitario de Estudios de la Mujer, mostraron «públicamente su repulsa ante lo sucedido» y recordaron «el compromiso de esta institución académica a favor de la igualdad y en contra de las violencias machistas en cualquiera de sus manifestaciones».
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La Universidad granadina, tras ser preguntada por este periódico, envió ayer a través de su Oficina de Comunicación, una respuesta en la que lamentaba «los desafortunados comentarios» de Marín. Exponía que el rector de la UGR, Pedro Mercado, llamó personalmente al rector de la Universidad de La Laguna, Francisco García Rodríguez, para aclarar lo sucedido, y trasladarle su «malestar por estas declaraciones, ajenas a nuestra institución y realizadas a título personal». A lo que agregaba que «igualmente, el propio autor de las mismas envió en septiembre una carta, expresando sus disculpas y admitiendo su equivocación, a la ex rectora Aranda, al Consejo Social, al rector de la Universidad de La Laguna, y al rector de la UGR, Pedro Mercado. Disculpas que fueron aceptadas», según estas mismas fuentes.
La Universidad granadina recordaba y defendía, en esa respuesta, «su firme e inequívoco compromiso con la igualdad entre hombres y mujeres y la necesidad de combatir el machismo desde las instituciones en todas sus vertientes y facetas».
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Antonio Marín trasladó, en esta línea, a este periódico unas palabras. «Tuve ocasión de presentar mis disculpas en septiembre pasado por unas palabras poco afortunadas, fuera de tono. Disculpas que fueron aceptadas por la Universidad de La Laguna y, en la UGR, por la exrectora, el rector, la directora del Instituto de Investigación de Estudios de las Mujeres y de Género y otros», declaró.
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