La España de Marsé
Puerta Real ·
Su narrativa autodidacta siempre sorprendió a una intelectualidad catalana, sofisticada, de ascendencia burguesaSecciones
Servicios
Destacamos
Edición
Puerta Real ·
Su narrativa autodidacta siempre sorprendió a una intelectualidad catalana, sofisticada, de ascendencia burguesaEl pasado sábado, 18 de julio, a los 87 años, murió Juan Marsé, la voz de los perdedores, y uno de nuestros grandes novelistas. Aunque fue hijo de Domingo Faneca y Rosa Roca, es conocido como Juan Marsé Carbó, al ser adoptado por unos amigos ... de sus padres, al quedar huérfano de madre. Empezó a trabajar con 13 años, y, con veinte, arreglaba relojes por la mañana y, por las noches, escribía críticas de cine y relatos literarios en diferentes revistas.
Marsé forma parte de la Generación de los 50, junto a Gil de Biedma, García Hortelano, Vázquez Montalbán, Juan Goytisolo, Carmen Martín Gaite, Ángel González, Terenci Moix o Eduardo Mendoza. En sus obras aparece el desencuentro entre la burguesía catalana y el proletariado, y en ellas describe el mundo de los derrotados y las miserias de la posguerra. Sus mentores literarios, Carlos Barral y Jaime Gil de Biedma, le recomendaron que marchara a París a escribir, consiguiéndole una beca. Allí fue mozo de laboratorio, dio clases de español, tradujo películas y entró en el Partido Comunista en 1962, aunque a los dos años lo abandonó.
Cuando en 1966, con apenas 30 años, este autor catalán autodidacta, criado en la calle, escribió 'Últimas tardes con Teresa', donde reflejó magistralmente el profundo conflicto existente entre burguesía y pueblo llano, la novela tuvo tal impacto en la vida española que se le concedió el premio Biblioteca Breve.
No menor incidencia tuvo 'Si te dicen que caí' (1973), la novela de la Barcelona charnega y perdedora, basada en la muerte de Carmen Broto. El Premio Planeta lo obtuvo gracias a 'La muchacha de las bragas de oro' (1978), en la que un escritor falangista redacta sus memorias, modificándolas, para hacer atractivo su tenebroso pasado. En 'El amante bilingüe' (1990), el protagonista, engañado por su esposa, termina en la pobreza más absoluta, tras abandonar el hogar. En 1993 escribió 'El embrujo de Shangai', en la que los maquis siguen actuando en los Pirineos. En 2000, publicó 'Rabos de lagartija' con la que obtuvo el premio Nacional de Narrativa y el de la Crítica. En 2008 consiguió el Premio Cervantes.
Los soberanistas catalanes siempre lo consideraron un obstáculo para su causa. Él mismo lo decía: «Yo no soy nacionalista y todas las banderas me repugnan. Con mi huerto me basta». No escribió en catalán, sino en castellano. Nunca tuvo reconocimiento oficial en Cataluña, ni tuvo presencia en la oficialista TV3.
Marsé es uno de nuestros escritores más prestigiosos, por el dominio de su pluma, por su coherencia, por su honradez, por no renegar nunca del pueblo, frente a arribistas y soberanistas. Su narrativa autodidacta siempre sorprendió a una intelectualidad catalana, sofisticada, de ascendencia burguesa. Su obra es difícil clasificarla: no pertenece a la novela desdoblada, meramente descriptiva, pero tampoco a la sórdida novela social que cansa y aburre. La suya es una nueva modalidad, enmarcada dentro del neorrealismo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.