Una de las temáticas de mis artículos para esta sección es la relación de los escritores de mi ciudad, La Plata, con sus pares andaluces: Juan Ramón con Ana Emilia Lahitte, Horacio Castillo con Aleixandre. En este último transcribí fragmentos de cartas, aunque sin tener ... a la vista los originales. De esta otra de Aleixandre tengo copia facsimilar. Se trata de una misiva enviada a Aurora Venturini (La Plata, 1922 – Buenos Aires, 2015). Tuve la suerte de conocer y tratar mucho a Aurora, perteneciente a la generación poética del 40, generación que tuvo semejanzas con la del 39 española y que experimentó el influjo de Ortega y Gasset. No sé si Aurora conoció personalmente a Aleixandre, pero el tono afectuoso de éste da a entender que mantenían correspondencia regular.
Publicidad
La carta en cuestión está mecanografiada y fechada en Madrid, octubre de 1962. Aleixandre ha recibido su libro 'La trova', sobre el cual emite juicios laudatorios: «Voz de poesía verdadera me traen sus versos desde lejanas orillas. Es usted un regalo para el idioma que en 'Laúd' y en 'La trova' renace, reverdece a impulso de agua nueva. Joaquín de Estrambasaguas [sic] me dice: «Que vaya su palabra a acompañarla, que vaya hasta su bello país de puerto verde-azul; que vuelva usted, Aurora, a nuestra España-madre hija del Plata y de sus predios adyacentes. Creemos de lo suyo, que muy pocos (o ninguno) lo alcanzan; nacer en poesía; vivir en ella; actuante en ella; qué posición la suya Aurora…».
Parece escribir de corrido, sin borrador previo, omite sangrías y espacios entre la puntuación, las líneas son irregulares. Al final, añade de puño y letra: «Su amigo / Vicente Aleixandre». Se trata, por lo transcrito, de una carta poética, en la que el andaluz imagina que toda Argentina es un puerto verde-azul, cosa bastante lejana de la realidad. En un momento agrega: «Aguardo sus poemas para publicaciones –se harán– junto a los míos y de Gerardo».
Se referirá a Diego, que alguna vez pasó también por el Club Español de La Plata. Pero, que yo sepa, esa publicación nunca se hizo. Quizás fue otro proyecto frustrado, como su idea de visitar la Argentina. Los que sí viajaban eran los libros y las cartas. Reliquias de un mundo que ya no existe y que a veces me provoca un poco de melancolía.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.