Marionetos

A veces, para humillar a un hombre basta con decirle: «Sujétame el bolso». Aunque también tiene efecto el llamado 'handbagging'. Referido a una mujer, es ... lanzar un fiero ataque verbal. Referido a Margaret Thatcher, es la forma de tratar con la gente que le disgustaba. Michael Dobbs, que había sido su jefe de gabinete, sufrió en 1987 cómo le atizaba «con su metafórico bolso una y otra vez». Luego escribió 'House of Cards'. Cristina Kirchner hace 'handbagging' por carta. Ha escrito al presidente argentino que ella lo puso en el cargo y debe obedecerlo. En 'Queridos niños', la última novela de David Trueba (qué bien escribe este chico), hay un vicepresidente del Gobierno de nombre Mario Nieto que pasa a presidente (que ponen de presidente). Le llaman Marioneto. Algo así como Quim Torra en su día (el valido, lo llamaba Arcadi). Cristina Kirchner tiene su Marioneto y quiere que todo el mundo lo sepa. Mira, Alberto Fernández, sujétale el bolso..