Perdido en la democracia
PUERTA REAL ·
Hasta tal punto llega el grado de abducción mental, que yo me pregunto qué va a ser de mi vida el mes que viene sin una buena campaña electoral, un sábado de reflexión y un domingo de votacionesSecciones
Servicios
Destacamos
Edición
PUERTA REAL ·
Hasta tal punto llega el grado de abducción mental, que yo me pregunto qué va a ser de mi vida el mes que viene sin una buena campaña electoral, un sábado de reflexión y un domingo de votacionesMe siento extraño. Me he levantado y no he visto ni escuchado a los políticos con sus muletillas de siempre, con sus eslóganes de siempre, con sus mamarrachadas de siempre. No hay agenda de mítines, ni propaganda electoral, no estamos en campaña. Será posible. ¿Pero ... qué está pasando en este país? Seguramente es que alguien ha perdido los papeles, porque lo normal en el último año ha sido estar en precampaña, postularse para lo mejor desde cualquier ángulo, y erigirse en salvador de la patria, a cambio de unos votos que les aseguren vivir a cuerpo de rey durante los próximos cuatro años.
Sus señorías nos la han vuelto a jugar y nosotros hemos entrado al trapo, en la creencia de que nos van a resolver los problemas, van a mejorar la sanidad, las pensiones, los planes de estudio y el salario mínimo, con la abolición de la reforma laboral peperiana en su integridad. Hemos sido tan pardillos que hemos entrado en su juego, olvidándonos de que dentro de cuatro años, o antes, estaremos aquí otra vez con menos dinero en nuestra cuenta, con peores servicios, con mayor deuda pública, escuchando las mismas promesas que nos hacían albergar un mínimo de esperanza en el sistema que está corrompido y viciado desde hace veinte años. No nos tomamos en serio lo de la regeneración política, y ese es nuestro error. No les pedimos cuentas por sus enfrentamientos partidistas, que tienen como resultado la laceración de los ciudadanos, el sufrimiento de los más desfavorecidos, cuyos gritos nunca llegan a sus señorías.
Con la credencial de parlamentario o representante público, les dan un kit que, entre otras muchas cosas, contiene una alta dosis de sordera, para no escuchar cuando te demanda algo justo, o lo que es peor, lo que prometiste y no has cumplido. El desencanto, la frustración, el pesar y la rabia es tan grande, al comprobar cómo campaña tras campaña, legislatura tras legislatura, nos siguen haciendo las mismas promesas, las que nunca cumplen, y además, nosotros vamos a votarlos en la hipérbole del síndrome de Estocolmo, como borregos sociales, dóciles y bien amaestrados. Hasta tal punto llega el grado de abducción mental, que yo me pregunto qué va a ser de mi vida el mes que viene sin una buena campaña electoral, un sábado de reflexión y un domingo de votaciones.
Si los últimos meses de mi vida han sido así, cómo voy a pasar yo, tan tranquilamente, del todo a la nada. Alguien tiene que ayudarme. Mi psiquiatra me ha dicho que no desespere, que tiene solución. Me ha recomendado que saque de la televisión a la carta, toda la información electoral y los debates de los líderes, y que con buen tino, me los vaya proyectando en dosis recomendables cada día. Respetando las quincenas de campaña y descansando el día antes de votar. También me ha dicho que vaya a Almacenes el 95 en la plaza de Bibarrambla, y me compre una urna, la instale en el portal de mi casa, y el domingo, de camino que voy a por el pan y el periódico, que aproveche para dejar mi voto. Luego si me apetece por la noche, yo mismo puedo hacer el recuento.
Todo con tal de que esto no acabe en una locura, solo por la ocurrencia de los políticos de haber dado por terminado el periodo electoral. Hasta ahí podíamos llegar. Mi hermano Jesús también tomó sus propias decisiones cuando se jubiló para no volverse loco. Se compró una valla metálica a plazos y ahora, cada mañana sale de su casa, y la coloca al borde de la obra que le parece más interesante para contemplar. Nos viene de familia.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
El pueblo de Castilla y León que se congela a 7,1 grados bajo cero
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.