Jaén FS arranca el curso liguero con triunfo en casa de Burela (1-4)

El choque tuvo un inicio eléctrico. Al tempranero tanto del jienense Míchel, de la factoría del arquitecto Dani Rodríguez: balón en largo a la banda para que Dani Zurdo la pusiera de cabeza en el área y encontrara la llegada de Míchel, respondió muy pronto el Burela, antes de que se cumpliera el primer minuto, por medio de un potente zurdazo de Rikelme que tocó la madera del palo antes de alojarse en el fondo de la red.

En el minuto siete volvió a golpear el Jaén Paraíso Interior FS. Por mediación de Renato. Un potente disparo cruzado, con pierna izquierda, ante el que poco pudo hacer el meta local.

Los locales apretaron buscando la igualada pero se toparon con el acierto de Dudu bajo palos. Varias manos salvadoras para mantener al Jaén FS por delante en el luminoso y un tiempo muerto del técnico jienense para refrescar las ideas y las piernas de los suyos, superado el ecuador del primer round.

Al descanso se llegó con la mínima ventaja visitante gracias a la tercera mano salvadora de Dudu.

El choque se reanudó con una alta intensidad y ocasiones en ambas áreas. Espíndola salvó el dos a dos en una acción con Rikelme como protagonista y Cristian Rubio se topó con el palo en su búsqueda de aumentar la renta jienense.

El ala cierre, Antoniazzi, puso a prueba a Michal Kaluza y en el otro área, Espíndola seguía colocando ladrillos en su muro inexpugnable.

Fue Alan Brandi el que aportó algo de tranquilidad, en el minuto 28, al culminar otra acción ensayada. Sutil toque de tacón tras saque de falta de Chino.

A falta de diez minutos para el final, el Jaén FS entró en el bonus fatídico de las cinco faltas. Malaguti, en el 34, mandó un disparo a la madera. Y los locales, en la siguiente acción, también cometieron la quinta falta.

Espíndola, con el pie, salvó un gol que hubiera metido al Burela en el partido y Renato, en el 37, culminó una contra magistralmente dirigida por Míchel.

Los locales arriesgaron con el juego de cinco pero el Jaén FS se defendió con eficacia e incluso Chino, tras un robo, pudo marcar.