Lunes Santo sin mirar al cielo

A pesar de ser hoy jornada laborable los granadinos se volcarán con la Semana Santa desde hora bien temprana, en concreto desde que la cruz de guía de la cofradía del Trabajo salga a las calles del Zaidín. La primera cofradía en salir será la del Trabajo, y luego a la par se pondrán en la calle el Rescate, desde la iglesia de la Magdalena, y los Dolores desde el templo San Pedro. El Realejo se hace hoy protagonista con la cofradía del Huerto de los Olivos y el día se cerrará con la cofradía silente del Cristo de San Agustín. Un extensísimo cortejo acompañará a los dos pasos de la cofradía, volviéndose a crear momentos íntimos de gran emoción al regreso de la corporación por la calle San Antón. Y es que el Lunes Santo es un día de contrastes y emociones, tanto en los barrios del Realejo y Zaidín, con las dos cofradías de carácter más popular de la jornada, como por la Carrera del Darro en torno al palio de color rosa asalmonado de los Dolores, o con el Rescate, que nuevamente recibirá el cante de saetas en su regreso al templo.

Este es un año muy especial para la cofradía del Rescate, ya que celebra el trescientos aniversario de la hechura de la imagen del Señor. Los actos conmemorativos se iniciaban hace pocas fechas, y en Cuaresma destacaron algunos como poder ver al Señor nuevamente con pelo natural. Si hace trescientos años la imagen, atribuida a la escuela de los Mora, se adentraba por calles como el Zacatín en su primera salida procesional, hoy lo hace por su recorrido habitual, pasando por carrera oficial tras el paso de la cofradía de los Dolores, cofradías que estuvieron muy vinculadas en el pasado. El acompañamiento musical de la hermandad lo pone un año más la Agrupación Musical María Magdalena de Arahal, una de las formaciones musicales más importantes de toda Andalucía y que cada vez tiene mayores lazos de unión con la cofradía granadina. El paso irá bellamente exornado con una alfombra roja de claveles detrás de los que se esconden multitud de promesas, peticiones, oraciones y devoción, ya que cada año son regalados por los vecinos del barrio y devotos, que en las vísperas del Lunes Santo los llevan hasta el templo de la Magdalena.

Cada Lunes Santo el Zaidín sale a conquistar Granada… y lo consigue. La cofradía de la Luz y el Trabajo es la primera en echarse a la calle desde este barrio cada Semana Santa. Hoy, a partir de las cuatro de la tarde, volverá a repetirse el ritual en las puertas del templo del Corpus Christi, en medio de un ambiente festivo entre los vecinos de este populoso barrio. A esa hora exacta unos nazarenos de la cofradía saldrán del templo por una de las puertas laterales del mismo, dirigiéndose luego hasta el amplio portón de salida y golpearán la puerta para que la cruz de guía se ponga en la calle. En ese momento se abrirán las puertas del Corpus Christi, llenándose su interior de la luz del sol de la tarde y las calles del Zaidín de la Luz de esta hermandad en la que este año debuta como hermano mayor Ángel Aguilera. Entre sus estrenos presenta la finalización talla del canastillo del paso de Cristo, una nueva disposición de las figuras del misterio, nueva vestimenta para el soldado romano realizadas por José Rodríguez Abad con nueva coraza en orfebrería y casco de plumas blancas, rostrillo para la Virgen de la Luz donado por hermanos, y manto negro para la Virgen del Consuelo (en recuerdo de Manuel Ruiz Pareja, hermano fallecido recientemente). Así mismo, estrena el paño de la Verónica, donde Juan A. Galdón ha pintado el rostro de Jesús del Rescate. Se trata de una de las corporaciones que más arropo popular tienen, y eso se podrá contemplar tanto en la salida del cortejo como luego, ya entrada la madrugada, al regresar los pasos nuevamente por la Avenida de Dílar. Este año acompañan a la cofradía la Banda de CC y TT del Gran Poder y la Banda Virgen de los Remedios, ambas de la capital granadina.

Cada Lunes Santo la Carrera del Darro se llena del color característico rosa salmón que caracteriza a la cofradía de Los Dolores. Y es que si hay alguna cofradía vinculada a un color determinado esa es la de los Dolores y el color rosa asalmonado presente en las bambalinas de su palio, faldones, manto, sinpecado, paños de bocina… y tantos enseres. La hermanad, que encuentra su origen en el tercio de Requetés de la Reina Isabel la Católica, volverá a hacerse protagonista entre las miles de personas que llenarán las puertas de la iglesia de San Pedro, la Carrera del Darro y Plaza Nueva. Bello el discurrir de la hermandad con el telón de fondo de las torres alhambreñas, como bello verla pasar por delante de Santa Ana y la Real Chancillería, o luego contemplar su regreso nuevamente por estos puntos tan significativos de Granada.

Es la única cofradía que solo procesiona un paso de palio en la capital granadina, estranado este año la dolorosa una bella saya

En su cortejo no faltarán, tampoco, enseres y características significativas de la cofradía. Así, tras la cruz de guía, llama la atención una de las insignias más particulares, una bandera de grandes dimensiones que, al ser movida por el aire, parece incluso las velas de un barco. También peculiar es el traje que llevan los acólitos, con una capucha que cubre sus cabezas al llegar a la carrera oficial. La banda de música propia de la hermandad, dirigida por Antonio Linares, acompañará a la dolorosa.

La noche del pasado 23 de febrero la imagen del Señor arrodillado, titular de la cofradía de las Comendadoras de Santiago, estaba en la calle. Lo hacía, con motivo del rezo del víacrucis oficial de la Federación de Cofradías en la Catedral. Entonces la imagen iba sobre unas sencillas andas, pero ya pudo encontrarse con sus hermanos y devotos bajo el cielo oscuro de la ciudad. Hoy lunes volverá a reencontrarse con la ciudad, esta vez en lo alto de su espléndido paso dorado.

Las puertas del patio del convento de las Comendadoras de Santiago se llenarán de público para no perder detalle de la salida de la hermandad, primero el paso de misterio y luego el de palio, diseñado por Juan Díaz Losada, y tiene como base un programa simbólico e iconográfico basado en la figura de la Virgen María, obra de Mariano Sánchez Pantoja, actual hermano mayor de la cofradía. El conjunto está lleno de detalles, como las cincuenta rosas bordadas que aparecen en el techo, en alusión al Santo Rosario, que es la devoción más antigua del barrio del Realejo, copatrona de la ciudad y patrona del Realejo. Otros detalles son las corbatas de que cuelgan en el palio, en las que aparecen espejos, como elemento recurrente de la historia del barroco granadino. Como curiosidad, señalar que en el interior de una la caída frontal del techo de palio, por su parte interior, figura una Custodia, dentro de la cual va un escrito (que no se ve a simple vista) con el nombre de las personas que donaron el palio hace unos años. Estrena hoy la cofradía cuatro guardabrisones en orfebrería dorada, ofrenda de un grupo de devotos; dos angelitos para el paso de misterio, obra del escultor José Antonio Navarro Arteaga, donación de un hermano; enriquecimiento de las parihuelas de traslados; y nueva tanda de candelería para el paso de palio. Su acompañamiento musical será la Banda de Cornetas y Tambores de Jesús Despojado y la Banda de Música san Isidro de Armilla.

La jornada del Lunes Santo la completa la cofradía de San Agustín, última en ponerse en la calle en la segunda jornada de la Semana Santa. Concretamente lo hará al caer ya la noche, a las nueve menos cuarto. El silencio, el respeto y la solemnidad se adueñan de las calle al ir pasando la cofradía, que abre su cortejo con el lúgubre toque de la campaña del muñidor. En la salida la imagen del crucificado debe introducirse en el interior del calvario del paso hasta casi la altura de la cintura, salvándose de este modo las dimensiones de la puerta. Miguel García Almagro es el capataz general de la cofradía. La cofradía cierra la carrera oficial en la jornada del Lunes Santo, realizando la última estación penitencial de la jornada. Su regreso, con la calle San Antón en silencio y sin luz, todo con una nube de incienso y el sonido de la música de capilla y la campana del convento del Santo Ángel Custodio, es uno de los momentos más hermosos de la jornada.