Cetursa cifra en ocho millones el impacto de una huelga que continuará el sábado si no hay acuerdo

Decenas de empleados se concentraron desde antes de las 8.00 en la entrada del telecabina Al Andalus. Entre silbatos y bocinas, se mantuvieron firmes durante toda la mañana, ante la atenta mirada de la Guardia Civil, que preparó un dispositivo especial. También estuvo presente la Policía Local de Monachil. Esquiadores y snowboarders hablaban entre ellos desde primera hora y observaban desde una distancia prudencial la protesta. Algunos desconocían la convocatoria de huelga, otros se enteraron el viernes y decidieron subir por si había suerte. Finalmente no pudieron acceder a los remontes.

Una gran parte de los visitantes se habían desplazado desde diversos puntos de España, como Miguel, que llegó el viernes de Huelva para disfrutar del fin de semana en Granada y pensaba esquiar ayer. También Caterina y sus amigos, naturales de Portugal, pensaban disfrutar de la jornada de esquí. Regresaron a casa a media mañana, «decepcionados». Los forfaits comprados online se abonan automáticamente, sin necesidad de ningún trámite. Para los adquiridos en taquilla o cajeros debe solicitarse en sierranevada.es/devoluciones.

En cuanto al balance económico de la huelga, Cetursa Sierra Nevada informó de que ayer dejó de ingresar unos 800.000 euros, mientras que el impacto en toda la estación -con el total de negocios que dependen de ella- oscila entre siete y ocho millones de euros. En referencia al seguimiento de la huelga, de la plantilla total de remontes, que asciende a 400 empleados, tendrían haber asistido a su puesto de trabajo un total 192. Se presentaron 58 empleados en los distintos departamentos (máquinas, talleres, pistas, remontes, actividades, taquillas o atención al cliente), es decir, un 30% de los que debían estar en activo, lo que hizo «inviable» la apertura de la estación.

Conforme pasaban las horas, la zona de Pradollano se iba vaciando de usuarios. Algunos volvían a sus hoteles a descansar; hoy sí toca jornada de deporte, ya que la huelga no afecta al domingo. Otros se quedaron desayunando en bares y restaurantes. Los que no tenían pensado adquirir forfait para el domingo volvieron a casa.

En pleno festivo del Día de Andalucía, ambas partes vivieron una intensa jornada de negociación para tratar de evitar la huelga y el desastre económico que supone paralizar la estación en una de las fechas más fuertes de la temporada. Lejos de dar pasos adelante, se recrudeció el conflicto laboral.

Aún no hay cerrada ninguna reunión para avanzar en la negociación. Fuentes de ambas partes sobrentienden que la semana que viene volverán a sentarse, pero por ahora no se ha producido ningún acercamiento. Hablando con los implicados sobre el terreno, CC OO recordó que si fuese por el comité de huelga se habrían reunido ayer, pero están a la espera de novedades por parte de Cetursa. «El siguiente día del calendario de huelga es el día 8 de marzo, sábado, y por ahora se mantiene», señalado Salvador García, delegado sindical. La amenaza de huelga indefinida sobrevuela las negociaciones, aunque esperan no llegar a ese punto. «Necesitamos el aval de la Junta de Andalucía, alguien tiene que mediar», apostilló.

Desde el comité de empresa (por la sección sindical de CC OO) definieron la convocatoria como un «éxito total» y recordaron que «la pelota está en el tejado de Cetursa». «El viernes estuvimos casi hasta las 16.00 horas negociando, pero ante su postura, con declaraciones de intenciones pero sin concretar medidas, tuvimos que mantener la convocatoria. Son ellos los que tienen que solicitar una reunión y aportar puntos concretos para alcanzar un acuerdo y evitar el perjuicio que esto ocasiona a los trabajadores, que pueden perder su salario, y a los empleados de la sierra, que se ven afectados», apuntó Octavio Polo. La huelga indefinida, puntualizó, se plantearía para el mes que viene, pero esperan evitarla por haber conseguido un acuerdo. El comité de huelga está formado también por CSIF, UGT Y CGT.

En la otra cara de la moneda, Cetursa incidió en que tiene «disposición absoluta» para concretar y hacer operativos los acuerdos que ya tiene el comité de huelga en su poder, como son los 122 ascensos (por promoción interna) reconocidos por la Junta de Andalucía en el presupuesto de 2025. Se producirán, añadió, usando el procedimiento «más rápido posible». Ocurre lo mismo con las plazas de los indefinidos no fijos, que, «como se presentó al comité, se consolidan con un calendario que también se les entregó».

Por otro lado, el plus de altura para los trabajadores que ya no trabajan en altura, sino «en las oficinas de Granada, no se puede aplicar», ya que tiene tres informes «desfavorables» de la Dirección General de Presupuestos (DGP) de la Junta de Andalucía. «Ocurre lo mismo, es decir, depende de informe favorable del DGP, el uso de la provisión de fondos para las bajas incentivadas, jubilaciones anticipadas y jubilaciones parciales, así como el seguro de enfermedad», agregó la empresa.

Para concluir, Cetursa Sierra Nevada insistió en que lo que no pueden hacer ni ellos «ni ninguna otra empresa» es enfrentarse a «cambios constantes» en las reivindicaciones del comité de empresa, o introducir «nuevas demandas en la reunión». «Así es imposible cerrar acuerdos», concluyó.

Por último, el presidente de la Asociación de Empresarios de Sierra Nevada, Ordoño Vázquez, manifestó que todos ellos han puesto «la mejor de las caras para salvar la peor de las situaciones» con los clientes. En su caso, el día anterior ya avisó a los empleados para que no fueran a trabajar, y a los clientes de que cancelaban los servicios.

«La pérdida económica es enorme y los puestos de trabajos empezarán a desaparecer, esta debe ser una jornada de reflexión. Llevamos semanas intentando solucionarlo, lo veíamos venir, esperamos que las puertas cerradas hayan hecho comprender la magnitud del desastre», recalcó Vázquez, que quiso dejar claro que en ningún caso ha habido «agresividad» por parte de los empresarios. «Al revés, hemos estado aquí para echar una mano», agregó.

A su juicio, «nadie» ha pensado en ellos, los empresarios, que han buscado el «diálogo» entre las partes. «Se nos ha tratado con olvido y desprecio, en la puerta del telecabina habrá 200 personas manifestándose, pero en el otro lado estamos miles», lamentó. Además, que las negociaciones se hayan emplazado a la semana que viene, insiste Ordoño Vázquez, es «muy peligroso» para la continuidad de la actividad.