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Un mutante hambriento de cocaína

Un mutante hambriento de cocaína

Científicos americanos han modificado una enzima para eliminar la droga del organismo y curar así la adicción y la sobredosis

Miguel Margineda

Domingo, 29 de junio 2014, 00:25

Ciertas bacterias presentes en los terrenos donde se cultiva la coca dependen de una enzima que se alimenta de cocaína. Esta enzima quería usarse para el tratamiento a los adictos a esta droga, pero no podía sobrevivir a las temperaturas del interior del cuerpo humano. Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad de Kentucky, en Estados Unidos, ha creado con ingeniería genética un mutante de esta enzima que puede soportar el calor y además dobla su apetito por la cocaína.

Según informa Gizmodo.com, los científicos llevan tiempo buscando la manera de aprovechar el poder de absorción de las esterasas de la cocaína para usos terapéuticos. El problema es que dentro del cuerpo humano este tipo de enzimas tienen una vida media de 12 minutos. La primera enzima mutante desarrollada en Kentucky tenía una duración estimada de seis horas, pero ahora han conseguido que viva más de 100 días a temperatura corporal. Además, absorbe más cocaína que su versión salvaje.

Las pruebas en ratones han sido un tenido un éxito relativo. Han demostrado que puede usarse como antídoto a corto plazo, ya que los especímenes a los que se les administró soportaron dosis letales de cocaína durante tres días. Los estudios también demostraron que podría usarse como tratamiento de la adicción a largo plazo.

Esta investigación podría tener otras implicaciones si se consiguen con éxito otras modificaciones genéticas de enzimas. Por lo que se refiere a la come cocaína, aún es pronto para encontrar un medicamento basado en ella en hospitales o farmacias, pero los investigadores están convencidos de su futuro poder curativo.

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