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Martes, 19 de junio 2018, 02:15
Los radares pedagógicos tienen como objetivo «educar al conductor». Para ello, estos radares educativos muestran la velocidad a la que circula cada coche, para que sean conscientes de cómo circulan por la carretera. Dado que su función es únicamente informativa, estos radares no ... multan a los conductores, pero sí les alerta para que reduzcan la velocidad, en el caso de que estén rebasando el límite.
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Existen distintos radares pedagógicos. Uno de ellos es el Evolis, un dispositivo instalado en 45 países de todo el mundo que es capaz de detectar la velocidad de un vehículo a una distancia de 200 metros. Si la velocidad es adecuada, el Evolis mostrará una luz verde, mientras que si muestra unos números rojos que parpadean es que el conductor ha rebasado el límite permitido.
Según los expertos, este tipo de radares reducen hasta en un 25% la velocidad en los distintos tramos, debido a un efecto psicológico: la sensación negativa de estar recibiendo una llamada de atención.
La mayoría de las veces, estos radares están ubicados en las entradas de pequeñas localidades, así como en zonas peatonales y zonas escolares.
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