Un estudio revela la razón por la que hay que usar la doble mascarilla

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En declaraciones a la publicación especializada Science Daily, Emily Sicbert-Bennett, profesora asociada de enfermedades infecciosas en la Facultad de Medicina de la UNC y autora principal del estudio, explicó que «las mascarillas para procedimientos médicos están diseñadas para tener un potencial de filtración muy bueno basado en su material, pero la forma en que se ajustan a nuestras caras no es perfecta».

Los investigadores probaron la filtración ajustada de una serie de mascarillas en el campus de la UNC-Chapel Hill-. Llenaron una cámara de exposición de acero inoxidable de 3 metros con pequeños aerosoles de partículas de sal e hicieron que los investigadores se pusieran combinaciones de mascarillas equipadas con un puerto de muestreo metálico para comprobar su eficacia. Un segundo tubo medía la concentración ambiental de partículas en la cámara.

La eficiencia de filtración ajustada de una mascarilla difiere de una persona a otra, debido al ajuste único de la cara y la mascarilla de cada usuario, según arrojó la investigación. Sin embargo, los científicos concluyeron que, de forma general, una mascarilla quirúrgica tiene una eficacia de entre el 40% y el 60% en la disuasión de las partículas del coronavirus. Una mascarilla de tela tiene una eficacia aproximada de un 40%.

El uso de ambos modelos a la vez, la mascarilla de tela sobre la quirúrgica, incrementó alrededor de un 20% la eficiencia de filtración ajustada. Los modelos de tela mejoran el ajuste al eliminar los huecos y mantener el tapabocas quirúrgico más cerca del rostro, de forma que la nariz y la boca quedan cubiertas sistemáticamente. Cuando el orden es inverso, la eficiencia mejoró un 16%. «Hemos comprobado que el uso de dos mascarillas poco ajustadas no proporciona el beneficio de filtración que ofrece una mascarilla de procedimiento bien ajustada», sostuvo Sickbert-Bennett.