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Domingo, 14 de marzo 2021, 12:14
Usar el móvil en la gasolinera tiene multa, una prohibición que la mayoría de conductores ignoran y que está motivada por el riesgo de que se produzca una deflagración por una radiación electromagnética, un acontecimiento extremadamente inusual pero que, según la DGT, es posible.
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Concretamente, el Código de Circulación dice que «Los propietarios de aparatos distribuidores de combustibles o empleados de estos últimos no podrán facilitar los combustibles para su carga si no está parado el motor y apagadas las luces de los vehículos, los sistemas eléctricos como la radio y los dispositivos emisores de radiación electromagnética como los teléfonos móviles».
Algunos expertos opinan que esta norma se basa en una leyenda urbana. No obstante, sí es posible que se produzca una deflagración, pero para ello se deben dar condiciones muy concretas como que el dispositivo tenga un defecto de fabricación en la batería que provoque una chispa y que ésta entre en contacto con el carburante.
Aún así, la norma debe cumplirse y, de no hacerlo, el infractor se expone a una multa de 100 euros. Eso sí, la prohibición del uso del móvil se limita a la zona de repostaje y al momento exacto de recargar el combustible.
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