¿Podrás comprar coches diésel y gasolina de segunda mano desde 2035?

Una de las últimas decisiones de la Unión Europea enfocada a disminuir las emisiones contaminantes y sus efectos en el medio ambiente, ha sido la prohibición de la venta de coches diésel y gasolina en 2035. Esta decisión que venía estudiándose desde hace años, deja aún en el aire algunas cuestiones. Por ejemplo, cómo afectará esto al mercado de coches, en concreto, el mercado de los usados.

En concreto, ¿podrán comprarse coches usados de estas características? De entrada, se pensaría que, si la idea es evitar el uso de este tipo de vehículos, no podrían comprarse ni nuevos, ni usados. Sin embargo, la lógica de la normativa no funciona del todo de esta manera. Básicamente, lo aprobado establece que dentro de 12 años (2035) debe parar la producción de coches de combustión interna.

Esto, con algunas excepciones como la reconocida en la Enmienda Ferrari, bajo la cual se permite a los fabricantes una producción reducida de coches a combustión. Específicamente, estamos hablando de alrededor de 20.000 unidades al año. Por lo tanto, la norma es clara, si bien en la fecha señalada no se permitirá su producción y matriculación, sí que se podrá comerciar con los vehículos que ya están en el mercado.

De esta forma, la compraventa de vehículos usados que funcionen a partir de diésel y gasolina, seguirá estando permitido a partir de 2035. Sin embargo, a esta posibilidad hay que añadir las dificultades para acceder a los vehículos e incluso la rentabilidad. Es decir, dada las restricciones a estos coches, su precio será menor, pero también su oferta.

Además, tendrán encima otras restricciones para circular por ciertas zonas de las ciudades, sin contar con los impuestos que seguramente les vendrán encima. Considerando esto, seguramente, quienes quieran acceder a un coche de estas características en el futuro, se lo pensarán dos veces.

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