Así es ser piloto de acrobacias desde dentro del avión

No es raro que McLeod haya encontrado en el aire su medio. Por algo nació al lado del Red Lake, un enorme lago próximo a Ontario con más de mil kilómetros cuadrados donde es habitual utilizar el hidroavión como medio de transporte. Cuando McLeod era un bebé de seis semanas ya lo metieron en uno para llevarle de un sitio a otro.

A los tres años, como muchos padres que suben a sus hijos a las rodillas para dejarles que manejen el volante, bajo su vigilancia y en un descampado, el papá de McLeod hizo lo propio con su chico y los mandos de la avioneta. Siempre le ha resultado familiar volar en un avión y con 16 años ya tenía su licencia como piloto privado. Con esta carrera no resulta tan extraño que, en 2009, se convirtiera, a sus 25 años, en el piloto más joven de la historia en ganar las World Championship Series. Y ahí sigue, dando volteretas en el aire.