UD Almería

Control antidopaje sorpresa tras acabar el entrenamiento

Es una práctica habitual en la práctica totalidad de deportes y, sobre todo, en los profesionales. Pero no es menos cierto que, cuando un equipo (o deportista) es 'visitado' por la Agencia Estatal Antidopaje, para hacer un control, suele saltar la 'sorpresa'. Porque, en el caso del fútbol profesional, los jugadores están acostumbrados a que pueda suceder después de un partido. En lo que no están tan acostumbrados es en que suceda tras una sesión de entrenamiento, aunque sean dos las veces que los 'vampiros' acuden de media a lo largo de un curso.

En el caso de la UD Almería, ayer fue el día elegido por la Agencia Estatal Antidopaje para desarrollar algunos controles dentro de la plantilla. Fue al acabar el entrenamiento cuando se les comunicó a los seis 'agraciados' que tenían que acudir a la sala habilitada para tal fin en las instalaciones del Power Horse Stadium para realizar los análisis y pruebas pertinentes.

Los 'elegidos' fueron Adri Embarba, Íñigo Eguaras, Arnau Puigmal, César de la Hoz, Diego Mariño y Francisco Portillo. Todos aptos para el cuerpo técnico, de cara a la siguiente cita liguera contra Osasuna (16.15 horas) el próximo sábado. Por lo tanto, seis de los que estuvieron ejercitándose en el campo principal del Power Horse Stadium (a puerta cerrada) en la mañana de ayer.

A diferencia de otros deportes, en los que los 'vampiros' visitan a los deportistas en sus domicilios particulares y a cualquier hora del día (casi de madrugada en algunos casos), en el caso del fútbol es, como sucedió ayer, tras el entrenamiento celebrado por el equipo.

La 'consecuencia' que tuvo fue el retraso en la comparecencia de prensa de Adri Embarba, al retrasarse su control antidopaje tras el entrenamiento.

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