UD Almería

Se hace difícil destacar algo bueno de la UD Almería ante el Málaga

Todo partido tiene su crónica. Más o menos extensa, pero todos son comentados. Sobre todo cuando uno de los contendientes es un equipo de la máxima categoría del fútbol español, por mucho que esté de pretemporada. Así que la intención es la de intentar contar lo que el Almería ofreció en la tarde de este jueves ante el Málaga en Marbella. Pero admito que es bastante difícil destacar algo bueno del plantel entrenado por Vicente Moreno.

No ya porque saliera goleado. No hizo falta ni eso. Fue de un encefalograma plano. Que se podía entender por el calor. Que se podía entender por la intensidad de la propia pretemporada y sus entrenamientos. Pero la realidad es que no se vio, por ningún sitio, que entre los dos contendientes hubiera dos categorías de diferencia y que los de una división inferior lleven menos entrenamientos y, con muchos más cambios, menos cohesión que la supuesta de la UD Almería.

En los rojiblancos no hubo ataque. Muy plano en todo momento. Solamente un remate de Luis Suárez que fue desviado por Herrero. Eso ocurrió con empate sin goles. Hasta que Cristian marcó al aprovechar que Dioni se había llevado un balón ante la indecisión de Babic, que Robertone no pudo cortar.

Era para comprobar si el verse por debajo en el marcador, desde el minuto 17, suponía que el Almería pusiera cerco al marco malagueño. Agua. Bueno, mejor dicho, sequía. Nada de nada. Ni Ramazani, ni Embarba. Solamente hubo algo de 'tensión' por el enfado constante de Samú Costa, peleado con todos.

Con los cambios, en la segunda parte, Rojas lo intentó. Gui quiso poner cordura en el centro del campo. Pero ningún balón llegó en condiciones para el 'doble 9'. Dyego Sousa y Marezi fueron dos islas sin que le llegara la mejor agua posible. En dos semanas comienza la Liga. Con muchos cambios que se esperan.

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