Eguaras ve en Sevilla un sitio especial para la UD Almería

Juanjo Aguilera

Almería

Martes, 7 de marzo 2023, 23:21

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Dicen que «no puedes ganar al menos que aprendas cómo perder». Puede ser que la UD Almería no haya rescatado esa fase de aprendizaje que le tiene metido en una pelea que, pese a no ser deseada, es la lógica para un equipo recién ascenso a la máxima categoría. Lo mismo es que a ganar se aprende ganando. Iñigo Eguaras, centrocampista de la UDA, puso cierta 'cordura' en el debate que habla de conseguir victorias. El equipo indálico es un conjunto inexperto en la categoría que necesita quitarse de encima la pesada losa de las victorias lejos del Power Horse Stadium, un resultado que no ha llegado y que 'ancla' a los rojiblancos a unos puestos que generan dudas e incapacidad para abandonarlos.

El centrocampista antsoaindarra, que llegó a la UDA para contribuir al ascenso del curso pasado, pensó ayer en lo que viene por delante con un partido ante el Sevilla que tiene tintes de final. Pasa todos los años, dando igual la posición, si es para mirar hacia arriba, como el pasado curso, o para no tener la mirada fijada en el abismo del descenso, como pasa ahora. Este aventura, para el domingo, un partido al que hay que ir pertrechado de comprensión lectora porque, si la UDA está mal, el Sevilla, con los éxitos vividos en los últimos años, tiene más difícil adaptarse a ese particular camino lleno de obstáculos. «Ellos saldrán a comernos después de la derrota del otro día. Es un momento para ellos complicado porque en ningún momento se pensaban que iban a estar ahí abajo a estas alturas de la Liga» y para la UDA el Sánchez Pizjuán «es un escenario también para demostrarnos que somos capaces de ganar a equipos grandes fuera de casa y, sobre todo, de dar un paso al frente para saber que no queremos estar ahí abajo».

Lo cierto es que estar en descenso no es una situación con la que se conviva fácilmente. «Cuando parece que das un paso al frente, otra vez te metes ahí abajo. Se está viendo que está todo muy igualado, con muchos equipos en la zona para no entrar en descenso, pero este domingo tenemos una final contra el Sevilla. Esperemos dar la cara y sacar un buen resultado», decía Eguaras, que asumía el peso de la situación. «Es una situación en la que no quisiéramos estar, claro que va a ser complicado porque estamos muchos equipos metidos en la zona roja, la victoria que esperábamos el otro día no se dio nos iba a dar mucha moral, respirar un poco». Aún así y a la imagen, dijo tener claro que «el equipo creo que está capacitado para salir de esta situación que está siendo un poco complicada».

Y está claro que habrá que concienciarse para lo que viene el domingo. «Está claro que creo que va a ser un ambiente un tanto complicado, tanto para nosotros porque fuera de casa nos está costando muchísimo sacar una victoria y si queremos mantenernos está claro que no todo pasa por ganar en casa y, viendo la situación en la que están ellos, yo creo que el público también mostrará su enfado después de la derrota del otro día y será un ambiente hostil».

Se llega con la capacidad del conocimiento adquirido en la ida, en un duelo que se remontó para acabar sumando los tres puntos. «Está claro que cuenta. Sabemos cómo hacerle daño. Tenemos como referencia el partido de ida, pero tenemos que ser capaces de dar nuestra mejor versión». Y es que el rojiblanco no dudó en poner cierta mesura. «Las sensaciones del último partido sí que igual no fueron las que nosotros queríamos. Veníamos de un día histórico como fue ganar al Barça, queríamos sumar tres puntos aquí en casa y ahora vamos a Sevilla con toda la ilusión, con todas las ganas y sabiendo que somos capaces de competir y sacar algo positivo». Pese a que «sabemos que es un equipo de un nivel altísimo», a la para que la idea es «estar muy atentos, pendientes de que al principio no pase nada a favor de ellos y ahí alargar el partido y llevarlo a nuestro terreno». Sin duda una forma de adquirir conciencia de los logros, si llegan. «Si nos traemos esa victoria nos va a dar una moral enorme. Luego tenemos el partido contra el Cádiz, que es otra final, y necesitamos salir de ahí abajo».

En 90 minutos pueden pasar muchas cosas, pero Iñigo está más por la labor de sorprender cuanto antes porque esa situación podría provocar ventajas. «Sí. Está claro que el primer que reciba un pequeño susto le van a entrar esos pequeños nervios o ese run-run de decir que otra vez te vas a poner por detrás». De todas formas, aseguró que esa situación no se le pasaba por la cabeza. «Tenemos que hacer un partido muy serio, estar muy alerta, concentrados, muy metidos en lo que es el partido, en los 90 minutos y las ocasiones que tengamos aprovecharlas porque se está viendo que fuera de casa no te perdonan y necesitamos tres puntos como sea».

Apostaba el rojiblanco por pillarles «cuando menos se lo esperen» como modo en el que se le puede «hacer daño», para abrir «más el partido. Tendremos más espacio para hacer más daño». De todas formas tenía claras las intenciones de los de Sampaoli. «Creo que van a salir a morder, nos presionarán mucho, nos intentarán meter en nuestro campo, sabiendo que nosotros tenemos que ser un bloque muy fuerte y aprovechar las ocasiones que tengamos».

Lo cierto es que, antes de ir a Sevilla, el equipo indálico vive en una noria de sensaciones, que se ve afectada por «el resultado. Viendo el partido contra el Barça, sabiendo que nunca se le había ganado, llegas en un estado de euforia terrible. Sabíamos que teníamos que tener los pies en el suelo porque es un partido contra el Barça, pero son tres puntos más. Nuestro déficit está en que no somos capaces de lograr dos victorias seguidas, que se nos aleje un poco a una zona más tranquila». Villarreal era el día «después de la victoria contra el Barça». Así, el equipo llegaba «con la sensación de que íbamos a sacar algo muy positivo, sobre todo por las sensaciones que estaba teniendo el partido anterior y queríamos seguir la línea. No se dio el resultado ni las sensaciones y ahora tenemos otro partido para demostrar que el equipo tiene capacidad para ello».

Y ahora no queda otra que sumar porque el 'corte' de la salvación parece complicado. «Ahora es cuando realmente tenemos que demostrar que queremos estar en Primera División. Un equipo que el año pasado en Segunda hizo una temporada brutal, nos dio ese ascenso, y al principio siempre cuesta el cambio a Primera. Han pasado muchas jornadas, muchos meses, el equipo está asentado, sabe cómo funciona la Primera División y tenemos que dar un paso al frente». De este modo, ante las jornadas que quedan para llegar al final, Eguaras dijo saber «que estamos en una situación un tanto complicada, pero sabiendo que hay muchos más equipos metidos en el ajo. Ganas un partido y sales, lo pierdes y te vuelves a meter. Entonces tenemos que ser capaces de afrontar esta situación, con la capacidad de que tenemos nivel para estar en Primera».