UD Almería

Pepe Mel: «Si uno encaja 70 goles tiene que descender sí o sí»

Tras la dura derrota ante el Getafe por 1-3 en el Power Horse Stadium, que confirma el descenso matemático de la UD Almería a Segunda División, en un encuentro calamitoso que viene a ser un fiel reflejo de la temporada esperpéntica de los rojiblancos, Pepe Mel ha querido «pedir perdón a la gente, al aficionado, a la Unión deportiva Almería». Para el entrenador, «las cosas han ido mal todo el año, y creo que corresponde a este momento el pedir perdón por un trabajo obviamente mal hecho, porque estar en esta circunstancia supone eso».

Se trata de «un día complicado, un día difícil». En el vestuario rojiblanco, a escasa media hora del pitido final, imperan «sensaciones horrorosas y gente hundida, cada uno lleva el duelo de una forma diferente. Las personas somos diferentes, pero creo que todos los jugadores estarán de acuerdo conmigo en pedir perdón, que es lo mínimo que podemos hacer. En cuanto al partido, «ha sido muy extraño, sabíamos que el Getafe no se parece absolutamente nada al Villarreal, lo sabíamos y aun así, creo que en diferentes fases del partido hemos jugado al son que ellos han querido». Por su parte, el Almería «ha cometido los errores que, sin duda, en mi corto entender, han condenado al equipo».

Un equipo con un lastre, el defensivo, y es que «si uno encaja 70 goles en Primera División, tiene que descender sí o sí, porque o eres el Madrid y metes 200, o con 70 tienes que descender, y ese ha sido el mal y el resumen de la temporada».

En cuanto a los goles encajados, si ves los goles, «desde que yo estoy aquí, que parece que llevo mucho, pero no hace ni mes y medio que estoy, todos los goles han sido idénticos. El primero de Osasuna, el segundo de la Real, el primero también de la Real, los dos del Villarreal... Es jugada por banda que te cogen la espalda, centro al área y gol. Eso te condena, porque estás en Primera División y no te van a perdonar».

Una tarea pendiente que durante el lapso de tiempo que el madrileño lleva en suelo almeriense «no he sabido corregir, por lo tanto, soy muy responsable, porque era mi obsesión, sabía que el equipo se desangra por la defensa». Sin embargo, en ataque, «estoy contento, porque hemos marcado cinco goles en cinco partidos». Precisamente, en el único encuentro en el que el Almería no encajó, se obtuvo la victoria. «Pero no hemos conseguido nada más que esa portería cero». Para Mel, «mi obsesión de esta semana era a ver si conseguíamos contra el Getafe portería a cero, y bueno, errores que suceden y que tienes que aceptar, pero como en todo este deporte, para las buenas, pero sobre todo para las malas, la culpa es del entrenador, y yo no me perdono el no haber corregido».

¿Ahora qué?

Ahora quedan cinco partidos de extraña sensación, en los que «tenemos que dar con la clave para que el equipo consiga esa portería cero, o ese mínimo gol que te pueda meter en el partido, si no, vamos a sufrir mucho. La gente está sufriendo por el resultado final de la clasificación, pero yo sufro por el devenir del resultado, porque es mi trabajo».

Cinco partidos para abandonar la Primera División «que son cinco imágenes que van a quedar en la retina, y tenemos que luchar por eso». Además, no son partidos baladíes, porque «el Rayo en Vallecas es un equipo muy duro; qué os voy a contar el Betis en el Villamarín, y luego recibimos al Barça, ese es el calendario más cercano que tenemos». Tristemente, el escenario para el descenso «ha sido el peor posible, perdiendo el partido y descendiendo en casa». Lo que viene ahora es «airearnos durante 24 horas y empezar a buscar soluciones urgentes a algo que, como he dicho antes, es lo que mata a este equipo. No puedes encajar continuamente más de un gol, porque en Primera División es sinónimo de perder. 

Lo que le dice Pepe Mel a la afición, sin pretender que parezca en ningún momento que «escurro el bulto, porque me estoy poniendo yo el primero, no le puedo reprochar nada. La gente tiene paciencia infinita, y a nada que el equipo le ha dado algo de buen juego, como el día del Villarreal, les aplauden. Estaban deseando aplaudir al equipo, están deseosos de verle ganar. ¿Qué le podemos pedir a la gente? Lo único es pedirle perdón, que es lo que estoy haciendo yo aquí, porque yo soy el que está en los micrófonos y, por lo tanto, me corresponde».

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