Los pequeños detalles sentencian al Almería en Córdoba

En el segundo periodo, el conjunto unionista puso, sobre el terreno de juego, más que un equipo cordobesista reservón por el marcador a favor, conseguido entre Sergi Guardiola y René Román, y que pudo sufrir ese 'conformismo', pero ni el gol de Juan Muñoz subió al marcador del estadio califal, ni Sulayman Marreh estuvo en el sitio cuando se 'fue' del partido viendo con toda justicia la segunda amarilla. Su expulsión fue una 'estocada' para los rojiblancos que pasaron de estar a un centímetro de la gloria, a situarse a la misma distancia del abismo. Por un punto, el Almería está fuera del descenso.

Una derrota más hiriente si cabe por el segundo gol, el de Quim Araujo, encajado por la falta de contundencia y que sirvió además para perder el golaveraje con un Córdoba que, pese a la victoria por pequeños detalles, no consigue salir de la zona de descenso a Segunda B.

El inicio del partido tuvo a un Córdoba tratando de estrechar el terreno de juego, con acciones armadas todas por el centro, y el Almería, jugando por las bandas, tuvo el propósito de abrir el campo. En el minuto 4, llegó el primer disparo cordobesista. Lo intentó desde la frontal Edu Ramos y René Román consiguió despejar el peligro, en una fase de partido en la que el Almería tuvo el control del juego.

El conjunto blanquiverde jugó con muchos jugadores detrás del balón y se lo jugó todo en un fútbol basado en 'correr' y aprovechar algún disparo desde la frontal del área. En el minuto 9, el disparo de Aguza se marchó por encima de la portería defendida por el conjunto rojiblanco, sin peligro de gol. Dos minutos después, el que lo intentó fue Aguado, el canalizador del juego cordobesista, y la mano de René hizo que el balón se marchara a saque de esquina. El propio Aguado, un minuto después, lo intentó después de un balón atrás de Sergi Guardiola, pero el balón se marchó por encima del larguero.

El Córdoba tuvo el control en esa fase, en la que adelantó la presión, para acercarse al marco de René Román. Una pérdida de Sulayman Marreh supuso una dejada de Sergi Guardiola sobre José Antonio Reyes, que no disparó cómodo por la aparición de Ángel Trujillo, que mandó el balón a saque de esquina.

La UD Almería apareció poco en ataque. El equipo de José Ramón Sandoval, a base de presión, le ganó la partida a un cuadro rojiblanco pasivo, en cierto modo, en esa fase del duelo. En el minuto 24, una acción por banda izquierda de Javi Galán acabó en banda derecha para que Fernández la devolviera al corazón del área y Sergi Guardiola, atento, remató de cabeza y el balón, después de tocar en René, entró en la meta rojiblanca para adelantar al conjunto cordobesista.

El gol dio un aviso al conjunto rojiblanco que adelantó su posicionamiento sobre el terreno de juego. Tino Costa empezó a tomar galones, a ser el responsable de mover al conjunto unionista en ataque. El argentino gozó de una buena ocasión de gol en el minuto 39, después de un buen robo de balón de Sulayman, que se lo dio a Rubén Alcaraz y el barcelonés lo puso al segundo palo para Tino Costa que, solo, golpeó de cabeza pero a las manos de Kieszek, en la última acción de la primera parte, porque ya no hubo más fútbol en la misma.

En la segunda, sin cambios en ninguno de los dos equipos, el Almería comenzó haciendo mejor las cosas. Tuvo más balón y le ganó la partida a un Córdoba que lo hacía sufriendo por la propuesta de un equipo, el de Fran Fernández, que había ganado metros sobre el terreno de juego. Fidel Chaves, el ex del Córdoba, fue el jefe en la creación. Un pase suyo sobre José Ángel Pozo acabó con el enganche malagueño en el suelo y dentro del área, objeto de un derribo sin sanción, cuando se cumplía el minuto 63.

No hubo fútbol, solo el propuesto por la UD Almería ante un Córdoba que no quiso jugar. En el minuto 64, un buen servicio de José Ángel Pozo lo remató de cabeza Juan Muñoz, anticipándose a su marcador, al fondo de las mallas, pero el gol fue anulado por posible fuera de juego del delantero utrerano.

El Córdoba, ante el manejo de balón del que hizo gala el Almería, trató de aprovechar alguna contra. En el minuto 65, el disparo de Aguza lo despejó a córner René Román con una magnífica intervención. El partido parecía estar predispuesto para que lo remontara la UDA, que impuso su fútbol con algo más de peso y de propuesta merecedora de un cambio a favor. Sin embargo, una tonta acción de Sulayman en el centro del campo acabó con la expulsión del gambiano y el equipo acusó el golpe.

No hubo más fútbol. El cuadro de Fran Fernández, pese a intentarlo, no encontró los espacios ante un Córdoba bien plantado en defensa y sobre todo en el partido para impedir que hubiese juego. No lo hubo. El Almería no encontró una propuesta digna para cambiar el signo del partido, solamente con balones colgados que no crearon peligro para la meta defendida por Kieszek, que las cogió todas, pese a los intentos de la UD Almería, que volvió a aparecer, aunque sin el recurso que le permitiera cambiar el destino del partido. Fidel, en el 89, intentó sorprender al meta blanquiverde, pero el disparo, tocado en la puntera de Fernández, se fue a las manos de Kieszek, perdiendo así una oportunidad para haber logrado una permanencia que sigue dependiendo de los rojiblancos, pero para lograrla deberán hacer algo más que ayer en Córdoba.