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Recuperar a César Montes como próximo objetivo en la agenda del AlmeríaJordi Folqué
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Jueves, 9 de noviembre 2023, 20:39
Gaizka Garitano, entrenador de la UD Almería, reconoció la pasada semana que César Montes no estaba pasando por su mejor momento. Lo dijo en la previa de la cita liguera contra el Deportivo Alavés. Un choque en el que se quedó en el banquillo al escoger, el preparador vizcaíno, la pareja de centrales formada por Édgar González y Chumi. Decisión tomada tras ver que, pocos días antes, los dos escogidos por Garitano, para el choque copero en Talavera de la Reina, fue la formada por Édgar y Kaiky Fernandes. En un encuentro que sirvió para comprobar que, por ahora, las cosas no le están saliendo al traspaso más caro pagado nunca por parte de la UD Almería en su historia.
Porque sí tuvo minutos en tierras talaveranas, pero para jugar los últimos minutos como pivote defensivo. Intentaba el técnico ponerlo para que no pasara nada más en los instantes finales del choque y que, tanto Édgar como Kaiky, se encontraran con un apoyo por delante de ellos con capacidad para la contención, el juego aéreo y que pudiera contener las acometidas finales del equipo entrenado por Pedro Díaz.
Pero casi que no le dio tiempo a nada de eso. Porque hizo dos faltas claras que provocaron que el colegiado del choque le mostrara sendas tarjetas amarillas y, por consiguiente, tener que abandonar el partido antes del pitido final, dejando a la UD Almería con un jugador menos. Una circunstancia que no se reflejó en el marcador, dado que los rojiblancos mantuvieron su ventaja (0-2) para lograr la primera victoria en partido oficial de la temporada.
Un choque que, por lo que se vio ante el Deportivo Alavés, sirvió para que se mantuvieran en el equipo inicial hasta siete de los once que actuaron de inicio ante el Talavera. Cierto es que el resultado positivo copero no se pudo trasladar a la Liga EA Sports, pero sí que dejó claro que Gaizka Garitano había apostado por otros jugadores, dejando en el banquillo de los suplentes a un César Montes que, todavía, no ha logrado tomarle el pulso a la competición ni a que pueda ser el tan deseado líder de la defensa del conjunto almeriense, tal y como es deseo de la entidad.
Porque desde las oficinas del club almeriense se tiene muy claro que la inversión realizada para su fichaje se debe ir amortizando desde ya. Pasados ya dos meses desde que llegó fichado en los minutos finales del pasado mercado de verano, se entiende que el proceso de adaptación ha tenido varios aspectos que lo han podido retrasar.
Uno de ellos, como le pudo pasar durante años a Arvin Appiah, que pronto se 'olvide' de que ha sido el fichaje más caro en la historia del club presidido por Turki Al-Sheikh. Se entiende que esta circunstancia está pudiendo jugar en su contra al tener esa 'presión' de que todos lo señalen en cada acción en la que no pueda salir en ventaja. Como la doble amarilla en Talavera, que le impedirá estar en la siguiente ronda copera, como en otras jugadas que el foco ha estado en salir en la 'foto' del gol convertido por el rival de turno.
Por ejemplo, en los dos convertidos por la UD Las Palmas. En el primero, logrado por Munir, el centro desde la línea de fondo debió ser despejado por César Montes. Pero su tiempo de reacción y querer hacerlo con el pie equivocado llevaron a que el delantero internacional por Marruecos llegara antes y se estrenara en el presente campeonato liguero en su faceta de goleador, minutos después de haber fallado un penalti.
Fue una primera parte en la que César Montes ya vio una tarjeta amarilla por una falta en el centro del campo. Otra de las facetas negativas que está teniendo como rojiblanco. Cierto es que solamente se trata de su segunda amonestación de la temporada liguera, pero sí que está teniendo problemas para su 'espalda', como se ha comprobado en partidos como ante el Valencia.
Fue en el anterior encuentro a la debacle contra el Sevilla. Un choque en el que César Montes solamente aguantó 64 minutos. Pidió el cambio por unas molestias físicas, cuando el Almería ya perdía por 4-0 ante, en ese momento, los entrenados por José Luis Mendilibar.
Una lesión que le impidió estar en los dos partidos dirigidos por Alberto Lasarte. Aunque, más bien, se perdió la cita contra el Granada (lesión), mientras que el técnico determinó que debía estar en el banquillo en la visita al Nuevo San Mamés para medirse al Athletic de Bilbao. Un choque que fue el que terminaba el segundo ciclo de esta campaña, antes del segundo parón de selecciones y al que fue llamado por México para dos partidos.
Los que no sentaron muy bien en el propio club, pero que se quisieron entender como de 'medicina' para que César Montes pudiera borrar de su mente los dos meses previos de tensión, por su salida tardía del Espanyol, y de no encontrar su sitio en un Almería que ya estaba dando muestras de que no le salían las cosas, con cambio de entrenador.
Una estancia en Estados Unidos que le permitieron jugar los dos amistosos de su selección, actuando en todos los minutos en juego, pero que retrasó su conocimiento para los planteamientos que Gaizka Garitano quería disponer desde su llegada al frente de la UD Almería, con la idea de poder retomar el vuelo de un equipo que ya estaba en caída libre, con tan solo tres puntos en su haber tras nueve jornadas.
Pero estar durante pocos días a las órdenes de Garitano no impidió que el técnico vizcaíno le diera uno de los dos puestos de central en su estreno en el banquillo de la UDA. Fue en Montilivi y el Almería vio que una apisonadora pasó por encima suyo. Pese al 0-2 en el marcador, los catalanes afinaron la puntería y no encontraron ningún tipo de rival que le impidiera la remontada y quedarse con los tres puntos.
Una cita en la que, por primera vez, jugaron tres centrales en la segunda parte. Algo que, según Garitano, solamente ocurrirá en momentos muy puntuales y nunca de inicio. Una posibilidad para que hubiera más opciones de estar respaldado en el sistema de juego, pero que no se contempla por parte del técnico vizcaíno.
Todo hasta llegar al choque contra Las Palmas. Tras el error en el primer gol, nada había pasado en defensa durante el segundo periodo, hasta un centro sin relativo peligro al que César Montes no llegó para despejar, con un salto que despistó a un Mendes al que le rebotó el balón, dejando franco el esférico para que Sory Kaba sentenciara la derrota del Almería ante un desesperado Power Horse Stadium. Un error que lo puso en el banquillo ante la recuperación de Édgar González en Copa. Que lo siguió manteniendo en el banquillo en Mendizorroza frente al Alavés.
Ahora, justo antes de un nuevo parón, a la espera de la llamada de su selección para que, esta vez sí, llegue con la 'mente despejada' o para que, en caso de quedarse, que las dos semanas de parón le sirvan para hacerse, de nuevo, con el puesto de central titular y la cita en Getafe (25 de noviembre) se inicie el 'renacimiento' de un César Montes llamado para ser el líder de la actual UD Almería.
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