Samú Costa: «No creo que haya ni crisis ni bache y los goles llegarán porque hay calidad»

Datos que, al contar también con todo el apoyo del preparador catalán la pasada campaña y, en su primera como rojiblanco por parte de José Gomes, hacen que Samú Costa sea algo más que un fijo en los esquemas del inquilino del banquillo de la UD Almería. Es, a su vez, un estandarte para el club en lo que quiere para el presente y el futuro. No en vano, mientras que ha estado en la concentración de la selección sub-21 de Portugal, la entidad presidida por Turki Al-Sheikh anunció la ampliación de su contrato hasta el 30 de junio de 2029, siendo el que tiene la vinculación más prolongada de todo el club.

Fue mientras que se preparaba para debutar con el paso previo a que sea llamado por la absoluta. «Es el sueño que tengo desde pequeño», reconocía ayer, ya en Almería, en su comparecencia de prensa para valorar todo lo vivido en los últimos días y, también, desde que llegó al Estadio de los Juegos Mediterráneos como un muy joven proyecto de futuro que, desde el primer día en Marbella, se vio que venía para ser importante en el equipo y no esperar su oportunidad una vez que alguno de los 'mayores' pudiera fallar.

Lo vivido desde la semana pasada han supuesto, además de la ampliación de contrato del 2026 al 2029 y su estreno en la selección sub-21 lusa, lograr su primer gol con el combinado del país vecino. Fue ante Georgia con un remate desde la frontal y que contó con la 'ayuda' del cancerbero rival, al no ver el balón hasta que le llegó muy cerca de sus inmediaciones, sin poder atraparlo.

Todo vale para ir subiendo peldaños. Para ganar una confianza que, por los últimos resultados negativos del equipo, parecía perdida en el colectivo y hasta en el propio centrocampista portugués. Algo que no cree. Al menos por lo dicho en la sala de conferencias del Power Horse Stadium. «No creo que haya ni crisis ni bache ninguno», dijo para que todos lo tengan claro y que sirva para que el plantel mire con más optimismo lo que viene por delante, pese a que el calendario indica salidas complicadas, como la de este viernes (21.00 horas) a casa del Athletic de Bilbao en San Mamés.

Su negación de lo negativo fue una muestra de 'carácter'. Del que va sobrado, ya sea para animar a un compañero o para hacer 'callar' al público si entiende que los silbidos desde la grada están perjudicando al equipo en un partido. Lo primero lo ha hecho en varias ocasiones, como también 'enfadarse' con alguien con su misma camiseta (Rodrigo Ely) en Mallorca. «Todo está olvidado», al igual que el hecho de que, frente a Osasuna, se pusiera el dedo índice en la boca, en señal de silencio, cuando retrasó un balón al no encontrar pase a las posiciones delanteras.

El público criticaba que hacía falta gol y no se llegaba al área contraria. Tres partidos sin ver puerta ni, casi, hacer ocasiones. No es algo que le preocupe especialmente porque «el gol llegará». Con la confianza en sus propios compañeros y en él mismo. Como lo han demostrado en los últimos días, con goles marcados en sus selecciones de El Bilal Touré, Largie Ramazani y Samú Costa. «Tenemos un equipo joven, pero de calidad y que conseguirá marcar y ganar», dijo en una petición de 'tranquilidad' para todo el entorno rojiblanco y para que confíen en lo que pueden dar en el futuro a corto y medio plazo. El más próximo, la visita a San Mamés. «Será difícil ganar, pero lo podemos hacer si hacemos el plan que el míster nos ha dado», apuntó para ir creciendo día a día. Como él lleva haciendo desde que aterrizó cedido del Sporting de Braga.

Todo ha hecho que el club quiera que sea una de las referencias del vestuario. «Estoy agradecido a que el Almería quiera que tenga contrato hasta 2029», apuntó. Para ponerse en 'pensamiento' JFK al destacar que «el club te da cosas pero también tienes responsabilidad siempre. Estoy preparado para responder de la mejor manera, que es trabajando».

Pese a ser un referente, quiere ir paso a paso hasta en el vestuario. Porque no quiere ni pensar en ser uno de los capitanes, aunque pueda parecer que ya ejerce sobre el terreno de juego. «Tenemos dos que el club y el vestuario respetan mucho. Fernando (Martínez) y César (de la Hoz) lo hacen bien y no quiero quitarles el puesto», decía teniendo muy claro los llamados 'códigos' de un equipo profesional y que, se juegue más o menos, se deben respetar por parte de los más jóvenes.