La UDA le ha tomado el pulso a la Primera

Decía Jaume Torras en UDA Radio que el equipo había llegado al partido contra el Celta en un «nivel de confianza óptimo». Y lo decía justo después de haber perdido cruelmente en el Ciutat de Valencia ante el Villarreal (2-1) aunque durante muchas fases del encuentro fuera bastante mejor. Y no le faltaba razón al segundo entrenador de Rubi, porque solamente desde la certeza de que la línea de progresión que esta llevando el equipo rojiblanco es la idónea cabía esperar la remontada ante el RC Celta de Vigo(3-1).

Desde mi anterior artículo, hace ahora un mes, que titulé «Mucho por mejorar, demasiado por solucionar» tras caer 4-0 ante el Athletic, la UDA ha ido en franca mejoría, ganando con tres goles los partidos en el Power Horse Stadium y compitiendo mucho mejor en sus visitas ante el Betis y Villarreal en una evidente demostración de que Rubi, al frente de un gran equipo de profesionales técnicos, conoce perfectamente la categoría y sabe muy bien lo que se lleva entre manos. Lo digo con especial énfasis porque suele ser condición muy humana reconocer la valía de los profesionales solo cuando ya se han ido del club.

El dato es que en la duodécima jornada de Liga, tras cuatro victorias en casa y un empate en Elche, la UDA totaliza 13 puntos. Recuerden que el Almería con la mejor clasificación de toda su historia en primera, el de Unai Emery que concluyó con un magnífico octavo puesto, llevaba 12 puntos en esta misma jornada. Con esto solo quiero expresar que el escepticismo, e incluso el halo de pesimismo que había surgido en determinado entorno era cuando menos precipitado, si no infundado. Varias veces he dicho en El Desmarque de Interalmería TV que, si había un entrenador con crédito ganado para esperar que su trabajo diera los frutos apetecidos, era Rubi. El mismo crédito que en otras etapas se ganaron Unai Emery, Javi Gracia, Francisco o Fran Fernández.

La UD Almería que ahora vemos en el rectángulo de juego es un equipo muy atractivo para el espectador, valiente en su propuesta ofensiva y generoso en el esfuerzo. Competitivo. Aunque, como es lógico estando en la Liga de las estrellas, no siempre le podrá salir bien el partido planificado. Ahora mucho más, el conjunto prevalece sobre las individualidades y prueba de ello, con el estreno goleador en la Liga Santander de Lázaro Vinicius, César de la Hoz e Iñigo Eguaras, es que ya son 11 los distintos anotadores del equipo contando los 2 de Sadiq Umar.

Los emergentes debates en torno al equipo se han ido consumiendo como la llama de una cerilla. Jugar con tres o cuatro centrales ya no plantea un problema, sino distintas soluciones. Si la portería la ocupa Fernando o Pacheco da igual, ambos son de garantías. Y ya ni siquiera merece la pena cuestionar el equipo inicial puesto que, aunque haya un once más reconocible, para mi con dos piezas claves, César de la Hoz y Gonzalo Melero, casi todos merecen jugar. Sin necesidad de aspavientos ni concesiones a la galería, Rubi sigue siendo el líder silencioso de esta UD Almería que, transcurrido el periodo de adaptación, ya le ha tomado el pulso a la categoría, aunque aún siga teniendo margen de crecimiento.

Sobre todo en los desplazamientos, aunque no sea esta próxima visita al Camp Nou la más oportuna para reivindicarlo. Baste echar un vistazo a la clasificación para valorar como el conjunto rojiblanco está por delante de históricos como Español, Sevilla o RC. Celta, pero también para concienciarnos de que La Liga es una carrera de fondo en la que lo más importante sobre todo es ganar, como la UD Almería viene haciendo, a los rivales directos.