Casa Joaquín, 104 años fiel al producto en Almería

No hay carta, sería imposible, ya que Joaquín sirve lo mejor que encuentra en el mercado de abastos, que visita al menos tres veces cada día. Pero sí que hay clásicos como el calamar en aceite, la cazuela de rape en salsa de almendras y el dulce de membrillo casero, platos que no pueden faltar en la oferta diaria. Si el cliente tiene suerte, se topará con el morrillo de atún en escabeche, una delicia que sale de las manos de Encarna, la hermana de Joaquín, que guisa de maravilla.

Lo mejor es dejarse llevar por las recomendaciones del propio Joaquín. Las quisquillas de hueva azul de Alborán sobre hielo son otro de los manjares para empezar, junto con una selección de los más preciados embutidos. No hay tapas, pero de aperitivo es imprescindible probar el revoltillo de tomate frito casero y huevo.

Para terminar, y como digestivo, Joaquín ofrece una amplia y cuidada selección de maltas, rones añejos y licores que lleva coleccionando tantos años como tiene el local heredado de su abuelo.