Estafas a familias de futbolistas en Granada

Capitán del Cubillas: «Todos coincidíamos en que estaban pasando cosas muy raras»

Antes de aceptar ya dudó si enrolarse en las filas del Cubillas, pues «los jugadores antes nos informamos de cómo funciona, cómo pagan, para saber si nos conviene, y no tenía una buena referencia del club». Ya le habían hablado de deudas a jugadores en años anteriores. Sin embargo, el entrenador le aseguró que «había hablado con el referente del club y que estaba todo arreglado».

Antes de empezar a entrenar reunieron a toda la plantilla y les presentaron «un proyecto muy ilusionante». Comenzaron los entrenamientos en agosto de 2022. Al finalizar el mes requirieron al club el pago de los 20 días trabajados pero «nos dijeron que agosto no lo pagaban». Pasó septiembre y, ya a mediados de octubre, al reclamar la mensualidad, les indicaron que se les pagarían 20 días y no el mes completo, pero que «nos iban a descontar 100 euros para los abonos para que la familia pudiera venir a vernos».

Cuando empezaron a ver que se producían impagos los capitanes se reunieron y solicitaron al club hablar con la persona responsable del mismo, pero el coordinador, que ejercía de enlace, les emplazaba siempre a la semana siguiente alegando que la presidenta estaba fuera «cerrando acuerdos con importantes inversores».

Los impagos no fueron el único problema. Tampoco contaban con el material deportivo adecuado, alega el excapitán del equipo. Cuando empezaron a bajar las temperaturas pidieron ropa de invierno, sin embargo, «nos decían que se habían retrasado por problemas con el proveedor, pero que llegarían». De hecho, viajaban a los partidos vestidos con su propia ropa, «como si fuéramos una peña de amigos y no un equipo federado», explica Fran.

Las falsas promesas que fueron denunciando llevaron a la plantilla a aumentar su presión. Pidieron al coordinador que se personara la presidenta en el vestuario para dar explicaciones, pero «nunca lo hizo». El club, entonces, tomó medidas. Fran Fernández, el capitán, recibió una llamada en la que se le comunicaba su cese como jugador del Cubillas: «Me dieron la carta de libertad«.

Fran Fernández no fue el único al que despidieron. Otro compañero se negó a entrenar hasta que le pagaran y también recibió la carta de libertad como respuesta. El ya excapitán del Cubillas asegura que compañeros que llevaban más temporadas en el club, a pesar de que había algunas deudas, nunca habían vivido una situación como la que se ha dado esta temporada. «Me dijeron que eso no pasaba antes, que estaban pasando cosas muy raras», señala.

Las salidas se sucedieron antes del final del 2022 y fue el Granada CF, con el que el Cubillas tenía firmado un contrato de filialidad, el que se hizo cargo del asunto. Quedaron solo «cuatro cinco compañeros» de los que habían empezado la temporada y llegaron futbolistas procedentes de las categorías inferiores del club rojiblanco para intentar salvar la campaña.

Fran Fernández, que apunta que desde agosto hasta diciembre solo se ha cobrado mes y medio (con nóminas que oscilan entre los 100 y los 500 euros), se puso en contacto con el Granada. «Nos han dicho que estemos tranquilos, que ellos se van a hacer cargo de la deuda, pero están buscando la fórmula legal para hacerlo», entre otras cosas porque las cuentas del Cubillas están bloqueadas y porque se cobraba en negro. El ya exjugador del Cubillas apunta que el trato de la entidad granadinista ha sido siempre «cercano y muy correcto».