Los bares de la costa abren la persiana con timidez y optan por el servicio a domicilio

«Estamos perdidos. Los pequeños negocios no pueden aplicar la distancia de seguridad, además de que las pautas que hemos recibido en estas últimas semanas han cambiado mucho«, lamenta José Muñoz , vicepresidente de la asociación de hosteleros de Río Verde. Ninguno de los locales de restauración que componen la organización sexitana, compuesta por 30 negocios, abrirán ahora. Se esperaran a la nueva fase que les dará permiso para utilizar las mesas en las terrazas hasta el 50% de ocupación. «Abriremos esta semana para limpiar y adecuar las instalaciones», dice.

Almuñécar ha desarrollado su propia página web para que los vecinos puedan encargar comida a los establecimientos que han puesto en marcha los fogones. 22 restaurantes han subido ya sus cartas a la aplicación. En Motril, también se impone el servicio a domicilio. Hoy, día festivo en la localidad, sólo unos cuantos locales de comida rápida estaban abiertos. Sin embargo, desde el 28 de abril se permitió a los locales que reanudaran su servicio y este fin de semana, que ha coincidido con los permisos de salida para deportistas y mayores, algunos establecimientos ya ofrecían la opción de recoger en el local y había pequeñas colas en la plaza del Tranvía.

Para realizar el servicio de recogida, el cliente podrá llamar por teléfono o contactar con el restaurante de forma 'online' y el local fijará un horario de recogida. Además, la orden que hizo pública ayer el Gobierno precisa que «solo podrán permanecer abiertos al público durante el horario de recogida de pedidos».

Los locales deberán contar con un espacio habilitado y señalizado para la recogida de los pedidos y el pago. El restaurante deberá garantizar la separación física de dos metros o, cuando no sea posible, contar con la instalación de mostradores o mamparas para la protección de trabajadores y clientes. Asimismo, la empresa debe asegurar que los trabajadores cuenten con equipos de protección individual (EPIs), como mascarillas y geles hidroalcohólicos o jabón para la limpieza de manos.

Los clientes deben poder optar al uso de geles hidroalcohólicos y papeleras con tapa de accionamiento no manual a la salida del establecimiento.

Los chiringuitos, que no saben si será viable abrir hasta la tercera fase cuando las playas puedan recibir a los bañistas, no se plantean la modalidad de servicio a domicilio. «Sólo un par de establecimientos está considerando abrir este mes, pero ninguno hará encargos a casa. Las medidas sanitarias nos prohíben usar cristaleras o cortavientos y el tiempo en la costa es traicionero. Además, no tenemos la seguridad de que podamos flexibilizar ERTE», explica Francisco Trujillo, presidente de la asociación. Los empresarios esperan la resolución a las peticiones de los préstamos ICO para poder mantener a flote sus negocios. 25 de 62 chiringuitos de la Costa ya lo han solicitado. Trujillo muestra su apoyo a los «chiringuitos que van a abrir el camino» y que se atreverán a ofrecer el servicio en unas fases duras en las que sólo se podrá atender a visitantes locales.