Laura García Lorca: «He dimitido y no voy a volver. Cuando me pregunten, daré mi opinión»

El teléfono de Laura García Lorca lleva sonando sin parar toda la semana. «Han sido unos días muy agitados», dice la presidenta de la Fundación García Lorca, paseando por la Feria Arco, en Madrid. «He recibido llamadas de Nueva York, México, Buenos Aires, Londres… La gente está muy alterada y sorprendida de lo que ha pasado en Granada». Lo que ha pasado es que ella dimitió de su puesto en el Patronato García Lorca de la Diputación porque el nuevo director, Antonio Membrilla, llamó «memez histérica» a la memoria histórica.

Su golpe en la mesa –acompañado de una ola de reacciones políticas y culturales– provocó que el propio Membrilla no tomara posesión del cargo. Sin embargo, Laura García Lorca, por el momento, no piensa recular. «He dimitido y no voy a volver. Cuando me pregunten, daré mi opinión. No sé qué pasará». La sobrina del poeta sí espera que la persona que tome el cargo de director sea «alguien que conozca el mundo de la cultura y lo respete». «Alguien que sepa quién es Federico García Lorca».

El Patronato Federico García Lorca gestiona la Casa Natal de Fuente Vaqueros y el Centro de Estudios Lorquianos. No osbtante, Laura García Lorca sigue al frente de la Fundación Centro Federico García Lorca, en la Plaza de la Romanilla. Ella considera que la polémica del nombramiento de Membrilla demuestra «la repercusión del poeta en el mundo» y abre, a su juicio, un debate «más que necesario» que salta del Patronato al estado actual del Centro. «Debemos aprovechar esta situación tan desagradable para encauzar el Centro, que necesita un apoyo contundente. Cuando la gente se entera del presupuesto que tenemos se quedan sorprendidos y extrañados».

El Centro cuenta con «un presupuesto de 100.000 euros» para 2024. «Una cifra con la que organizar proyectos o actividades es muy complicado», subraya la presidenta. «Es el momento de sentarse con instituciones y empresas para darle el impulso que necesita y requiere este lugar. Lo requiere porque la presencia de Lorca en el mundo es muy fuerte. A Lorca se le identifica con todo lo mejor del arte, la música, el teatro, la investigación… y por todo lo que significa como figura defensora de las libertades. Esa luz que proyecta en el mundo es demasiado importante para que no se atienda».

¿Qué supone un presupuesto de 100.000 euros para un centro de estas características? «Que sea muy difícil hacer cualquier cosa. Y, sobre todo, que no hay personal trabajando en el Centro Federico García Lorca. Hay una persona responsable del Archivo. Un director gerente. Y ya. Los que trabajan en las exposiciones o eventos van y vienen». Para la presidenta de la Fundación, habría que multiplicar por diez el presupuesto anual. «Un millón de euros sería razonable», termina, con la esperanza de que este segundo golpe en la mesa también tenga consecuencias.

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