![Sáez toca el bajo junto a una vivienda con profusa decoración vegetal en el casco histórico de Lanjarón.](https://s2.ppllstatics.com/ideal/www/multimedia/2023/02/23/manolo-saez-guitarrista-lanjaron%20(9)-kdI-U190655012007gmD-1200x840@Ideal.jpg)
La Alpujarra, paraíso de artistas
Manuel Sáez, de bonaerense a cañoneroSecciones
Servicios
Destacamos
Edición
La Alpujarra, paraíso de artistas
Manuel Sáez, de bonaerense a cañoneroManuel Sáez conoció la Alpujarra por primera vez en el verano de 1990. Lo hizo en compañía de unos amigos. Llegaron hasta Capileira y de vuelta, atravesando Lanjarón, vieron que el desaparecido hotel Roma estaba en alquiler. Y eso fue exactamente lo que hicieron sus colegas, a los que, por cierto, no les faltaba el parné: alquilarlo. «A mí me pusieron al cargo del bar porque tenía mil y pico discos», recuerda. Fue entonces, en una de aquellas noches de disc-jockey, cuando una bellísima joven que se llamaba Sandra se aproximó a la barra y le pidió una manzanilla. Sus miradas se cruzaron y Sandra se convirtió en su esposa y en la madre de sus dos hijos, Raquel, de veintiséis años, y Eduardo, de dieciséis. Ella, Sandra, fue la culpable de que Manuel cambiara su Málaga por su Lanjarón. «Aquí me hice músico».
Noticia Relacionada
Pero rebobinemos. Manuel Sáez nació hace cincuenta y nueve inviernos en la calle Concepción Arenal de Buenos Aires. Sus padres,Manuel yCarmen, emigraron diez años antes desde Málaga en busca de mejor fortuna. Y la lograron. Abrieron un supermercado y se compraron una bonita casa unifamiliar. «Pero en 1975 aquello se puso muy feo desde el punto de vista político y económico y decidimos retornar». Videla estaba a punto de llegar al poder. «Me vine con apenas diez años, pero recuerdo a vecinos puestos contra la pared porque un amigo de un amigo de un amigo tenía una pistola».
Así que la familia de Manuel retornó a Málaga y después ocurrió todo lo que se relata en el primer párrafo de este reportaje. Que se enamoró de Sandra y que en 2001 ya estaba residiendo en Lanjarón, de donde era natural su señora. Fue cuando decidió convertirse en músico profesional. Lo intentó primero en el Conservatorio de Málaga, «pero lo mío era el jazz y el blues, y allí solo se estudiaba a Bach», bromea. Después acudió cuatro veces a las clases del gran Carlos Pino, en Málaga. «En un mes con él tuve suficiente para aprender armonía». Ya partir de ahí toda su formación fue autodidacta. «Tocando, probando, leyendo libros y aprendiendo de compañeros que siempre sabían más que yo».
Y así fue cuando llegó el gran momento. Su estreno delante del público. «Fue con mi banda Paralelo 36 en un concierto que dimos ante mil personas en la plaza Uncibay de Málaga», recuerda. «Se me cerró el estómago y sufrí un auténtico ataque de nervios;lo pasé tan mal que yo mismo me dije que si en la próxima actuación me ocurría, dejaba esto».Pero afortunadamente no sucedió y Manuel inició una carrera que le ha convertido, por méritos propios, en uno de los mejores bajos y contrabajos de Andalucía –también hace florituras con la guitarra–».
Después vino la grabación del primero de los sesenta discos en que ha intervenido. Fue con los Trust & Cia, una banda de funky de Málaga que en 1986 alcanzó el número treinta y ocho de los CuarentaPrincipales con 'Novela negra', una canción que contaba una historia de espías. «Mis compañeros eran buenísimos», asegura con admiración. Después, a mediados de los noventa, le contrató la agencia Espectáculo Mundo y estuvo cinco años de gira con los míticos Bordón 4. Nunca olvidará aquel bolazo ante seis mil almas en la mismísima plaza de Cataluña de Barcelona. «Nosotros no éramos como Peret, hacíamos rumba blanca», matiza.
Manuel Sáez
Músico
Poco después le llegó una nueva oportunidad en la orquesta del programa de Agustín Bravo en Canal Sur. «Aquello era todo un reto porque unos días acompañábamos a la Niña Pastori, otro a Los Delincuentes y al siguiente a los Ecos del Rocío. Después entró en la Orquesta Casino y luego, ya sí, se convirtió en un 'músico de sesión'.Lo llamaban los mejores para que participara en sus álbumes y ahí se fue ganando poco a poco, a base de talento y oficio, el marbete de ser uno de los grandes. Desde hace unos años, está volcado con el flamenco. Su nombre se asocia ya a los principales artistas de Granada. Ha acompañado a Pepe Luis Habichuela en su espectáculo 'In Paradisum', al Cheyenne o últimamente al gran José Fermín Fernández, que ha contado con Manuel Sáez para su último álbum, 'De la Unión a Córdoba'.
Y todo desde Lanjarón. Desde su 'home estudio' de la calle Huelva. «Aquí he encontré la paz y la tranquilidad que necesito para trabajar», afirma.También para dar esos paseos solitarios por el sendero de Sulayr, donde encuentra la inspiración. Manuel Sáez, que desde su ventana otea la Sierra de los Güájares, se ha convertido en un 'cañonero' de pro. Siempre está abierto para colaborar con la gente de su pueblo. Para tocarse unos temillas junto al Loco y 'Rumba canalla'.Para producir lo último del coro Agua Fresca. Ypara lo que haga falta.
Porque Manuel Sáez, el argentino, solo entiende y entenderá su vida residiendo en Lanjarón.
Publicidad
Inés Gallastegui | Granada
David S. Olabarri y Lidia Carvajal
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.