Así son los nuevos 'dientes de dragón' de la DGT: ¿para qué sirven estas marcas?

Consiste en unos triángulos blancos pintados en los bordes de una calle o carretera, que parecen verdaderamente los dientes de una fiera que quieren engullirnos. Esta nueva señal pretende comprobar si los conductores se sienten más inclinados a frenar que con la habitual señal de prohibición de velocidad máxima.

De momento están realizando una prueba piloto en la travesía de la N-122 en Nava de Roa (Burgos), entre los kilómetros 293,652 y 294,356. Si la idea funciona se aplicará al resto de carreteras y calles de nuestro país, invadiéndonos con estos «dientes de dragón». Y, evidentemente, las multas por superar los 30 km/h lloverán del cielo.

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Por cierto, esta señal es una extensión de otras iniciativas ya vistas en Europa: se trata de sugestionar al conductor para hacerle creer que la calzada se estrecha. Uno de los métodos empleados es plantar hileras de árboles en los bordes de la calzada; esto hace que los conductores frenemos instintivamente, ya que percibimos un estrechamiento de la carretera, con resultados infalibles.

Y si el conductor percibe que la calzada es más estrecha, aunque solo es una sugestión psicológica, automáticamente el primer acto reflejo es pisar el freno. Así que si ves esta señal, frena, o la DGT te pegará un buen 'mordisco'.