¿Realmente es saludable beber una copa de vino al día? Responde un nutricionista

«Culturalmente el alcohol está en nuestra dieta y forma parte de nuestro día a día, así que no tenemos por qué eliminar su consumo, aunque con matices», detalla a IDEAL Martín López de la Torre, presidente de la Sociedad Andaluza de Endocrinología, Diabetes y Nutrición (SAEDYN). Y es que, según añade, todo depende de la medida en que se consuma. «Puede tener algún beneficio en dosis pequeñas y llegar a ser muy perjudicial en dosis altas», aunque es algo que varía en función de la persona de la que se trate. «No podemos decir que el vino sea bueno o malo, todo es cuestión de como se utilice en la dieta y de quién lo toma», porque no es lo mismo una copa al día que varias, ni que lo tome una persona sana u otra con problemas de hígado o del páncreas.

Para responder a la gran duda de si realmente es saludable beber una copa de vino al día, Martín argumenta que, para personas sanas, tomar una copa de vino al día «no suele tener efectos perjudiciales». De hecho, detalla que tomar hasta dos medidas de alcohol en el caso de los hombres y una en el caso de la mujer no tiene por qué ser negativo, entendiendo por una medida de alcohol una copa de vino, una cerveza o una cantidad pequeña de una bebida alcohólica de más graduación. Es más, a largo plazo tomar alcohol en esa medida puede tener algunos beneficios como mejorar el colesterol bueno, el riego cardiovascular o reducir el riesgo de infartos, ictus, embolias y otras enfermedades vasculares. «Estos beneficios no implican que deba tratarse el vino o el alcohol como fármacos, ya que hay otras soluciones con las que lograr los mismos o mejores resultados».

Es por tanto que tomar una copa de vino al día puede llegar a ser beneficioso para algunas personas, aunque negativo para otras. «Existen problemas médicos que no admiten para nada el alcohol y algunos órganos que son sensibles a él si están enfermos. No es tan fácil como decir si es bueno o malo, sino que hay que ver en qué forma puede disfrutar cada uno de él». Como ejemplo, cuenta que el organismo también influye cuando se consume alcohol, habiendo personas que lo metabolizan más lento que otras. Así como la forma en que se consume, absorbiéndose de manera menos problemática si se toma acompañado de algún alimento.

Por un lado el consumo de vino y de otras bebidas alcohólicas puede generar beneficios. Aunque por otro también cuenta con un efecto directo sobre el peso de quien lo toma, porque tiene muchas calorías. «Cada gramo de alcohol tiene 7 calorías, lo que es bastante más que si se toman almidones o azúcares», detalla el presidente de SAEDYN, que explica como su consumo puede ir asociado a un incremento de peso y eso, a su vez, provoque problemas de hipertensión, aumento de triglicéridos, artrosis o una mayor predisposición a la diabetes.

«Si tomamos alcohol pero no controlamos el peso sus beneficios se contrarrestan y puede llegar a ser negativo». Es por eso que desde la medicina «no se puede recomendar el alcohol», ya que su ingesta puede llevar al abuso y eso derivan en el alcoholismo. «A nivel de salud siempre será mejor beber agua», finaliza Martín.