Ideal
Lunes, 14 de diciembre 2020, 11:54
El plan de medidas contra el COVID-19 aprobado por las comunidades autónomas y el Ministerio de Sanidad para la Navidad permite viajar a otras regiones para reunirse con familiares y allegados. Con el objetivo de disminuir las posibilidades de contagio algunas personas quieren realizarse ... una prueba diagnóstica para saber si están o no infectadas antes de viajar.
Publicidad
No obstante, según advierte al diario 20 Minutos Juan A. Pineda, profesor asociado de Medicina y especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Universitario de Valme, realizarse un test de COVID-19 «puede reducir muchísimo el riesgo de contagio, aunque no es garantía absoluta de que no se va a producir».
Asimismo, hay que tener en cuenta que no todas las pruebas miden lo mismo. Luisa María Botella, bióloga del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas del Centro de Investigaciones Científicas (CIB-CSIC), explica al citado diario que la primera opción a la hora de realizarse una prueba es la PCR. Esto se debe a que es la de «mayor sensibilidad» y la que indica si en el momento de la prueba se está infectado por el virus SARS-CoV-2. «La PCR amplifica, es como una fotocopiadora del material genético del virus», añade la bióloga. Esta prueba, según la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios), cuesta entre 115 y 180 euros. Además de su precio tiene otro inconveniente: es «una foto fija». Es decir, que el resultado puede cambiar en cualquier momento posterior si el paciente se expone a una situación de riesgo y, por tanto, podría llegar contagiado a la reunión familiar.
Noticias Relacionadas
Por otro lado, existen test de antígenos que también indican si una persona está o no contagiada en ese momento. El problema de estas pruebas, según Botella, es que «son los menos sensibles, tienes que tener bastante carga viral para dar positivo, puedes estar contagiado pero dar negativo por no tener suficiente carga viral», que es lo que ocurre con los asintomáticos. Estas pruebas pueden costar entre 40 y 75 euros.
En cuanto a los test serológicos, sirven para indicar si alguien ya ha pasado la infección y posee anticuerpos IgM (que aparecen unos días después de comenzar la infección) o IgG (que son los que persisten durante varios meses). Por tanto, este test sirve para conocer si se ha pasado la infección (o si se está en su final) pero no para indicar infección activa. De acuerdo con la OCU, realizarse esta prueba cuesta entre 50 y 60 euros. También se van a empezar a vendar kits rápidos en las farmacias que se pueden encontrar a partir de 25 euros.
Publicidad
Según Botella, la combinación de una PCR y un test serológico «sería lo mas completo, pero depende de la economía de cada uno». En cuanto al momento para realizarse la prueba, Botella señala que «habría que ajustar la fecha del test al máximo para tener los resultados lo más cerca posible o incluso el mismo día del viaje». Por ello recomienda contactar previamente con el laboratorio para saber el tiempo que tardan en tener los resultados. La bióloga recalca que no se debe viajar hasta conocer el resultado y aconseja reducir los nuevos contactos desde el momento en el que se conoce dicho resultado hasta la hora del viaje.
Por su parte, Imma Caballé, presidenta de la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio, recalca en 20 Minutos la importancia de no relajarse: «Hay que tener claro que ninguna prueba excluye ser positivo con un 100% de seguridad. En segundo lugar, ser negativo un día no quiere decir que al día siguiente o a los dos días no se pueda ser positivo. Aquellos que se lo hagan y sean negativos deben seguir manteniendo todas las medidas de seguridad (mascarilla, distancia, higiene de manos). Lo ideal es reducir los contactos al máximo y seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias».
Publicidad
«El objetivo de hacerse la prueba debe ser localizar positivos para evitar que acudan a los encuentros familiares», indica Caballé. Por ello, cuanto más cerca del evento se realice, más probable es evitar que una persona positiva acuda a una reunión familiar. No obstante, Caballé subraya que «las personas que se realicen la prueba y sean negativas deben evitar caer en una sensación de falsa seguridad». «Es necesaria mucha prudencia, no existe ninguna otra fórmula. Estas fiestas serán diferentes y tenemos que asumirlo», insiste Caballé.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.