Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
AIDA ORTIZ
GRANADA
Jueves, 27 de junio 2019
La Silla del Moro es uno de los miradores más emblemáticos de la capital granadina, por las impresionantes vistas que ofrece sobre la Alhambra. Se trata de un lugar que albergó una construcción de vigilancia y protección del Generalife y que se mantuvo ... en estado de ruina hasta mediados del siglo XX, cuando se inició la reconstrucción de la torre principal y de los muros. Fue en 1929 cuando se descubrieron los restos de su escalera de acceso y de la puerta de la gran torre, que estaba destruida casi en su totalidad.
Según los expertos, esta edificación debió tener un carácter militar y defensor, debido al lugar estratégico en el que se construyó. La Silla del Moro ha sido recuperada en los últimos años como un gran mirador del monumento nazarí hacia la ciudad, restableciendo así su uso patrimonial. Actualmente se puede visitar tanto sábados como domingos, de 9.00 a 20.00 horas.
Para llegar a ella, partimos desde la capital granadina, en una ruta que permite contemplar la ciudad en todo su esplendor y admirar la belleza del legado nazarí desde una perspectiva privilegiada.
Recorrido 12,46 km
Desnivel positivo 361
Desnivel negativo 365
Dificultad Fácil
Tiempo 3 horas
Partimos del aparcamiento del Generalife y nos dirigimos, para iniciar nuestra ruta a la Silla del Moro, por la carretera que conduce al Cerro del Sol, dejando a la derecha el Cementerio de San José. Un poco más adelante encontraremos el cementerio musulmán (la Rauda) y el Albercón Negro, un gran contenedor que sirvió para almacenar un gran caudal de agua con el que aprovisionar la Almunia de Los Alixares.
Continuamos nuestro camino hasta hallar un sendero señalizado que dejaremos a la derecha, hasta toparnos con dos carriles. Tomamos el de la izquierda, que nos llevará por la Dehesa del Generalife hasta el Mirador del Cerro del Sol, donde se pueden contemplar unas impresionantes panorámicas de Sierra Nevada.
Continuamos por el sendero hasta llegar a un carril que nos llevará hasta el Llano de la Perdiz, un lugar muy frecuentado por los granadinos para escaparse a la naturaleza sin alejarse demasiado de la ciudad. Retomamos el sendero hasta alcanzar el Reloj del Sol, que además de indicarnos la hora solar, señala los nombres de los picos de Sierra Nevada que se divisan desde el lugar.
Dejamos atrás el Reloj de Sol y nos dirigimos hacia el Aljibe de la Lluvia, el único que encontramos por esta zona y que dio servicio al Palacio de Dar al-Arusa, sirviendo también como reserva en épocas de sequía. Un poco más adelante, encontramos la Alberca Rota, donde se almacenaba el agua que se recogía en el aljibe. Continuamos el camino hasta llegar al paraje en el que se encuentran los restos del Palacio Dar Al-Arusa, una casa de recreo descubierta por Torres Balbás en la década de 1930.
Seguimos junto a la valla instalada para su protección por una vereda, por la que descenderemos hasta llegar a la Silla del Moro o Castillo de Santa Elena, desde donde contemplaremos las espectaculares vistas de la Alhambra. El singular nombre que se ha otorgado popularmente a estos restos arqueológicos provienen de la forma que la estructura presentaba, contemplada desde Granada, evocando un asiento desde donde contemplar la ciudad.
Para finalizar la ruta, una vez visitados los restos, nos dirigimos de vuelta por el sendero hacia abajo, hasta llegar al aparcamiento del Generalife.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
España vuelve a tener un Mundial de fútbol que será el torneo más global de la historia
Isaac Asenjo y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.